Una trombocitopenia se produce cuando disminuye notablemente el número de plaquetas en la sangre. Las plaquetas son producidas en la médula ósea y como todos sabemos juegan un papel fundamental en la coagulación sanguínea, de esta manera una trombocitopenia aumenta notablemente el riesgo de sufrir hemorragias.
De entrada los síntomas que produce una trombocitopenia no son muy llamativos ni característicos, estos pacientes pueden sufrir más hematomas de lo habitual, tanto los esputos como las heces suelen ser sanguinolentos, tienen hemorragias nasales que no cesan, presentan unas microhemorragias capilares llamadas petequias y le suelen sangrar las encías. El diagnóstico parte de estos síntomas y se confirma con un análisis de sangre que pone realmente de manifiesto la trombocitopenia. Tanto el tratamiento como y el pronóstico de esta patología variará enormemente en función de cual sea la causa que produce realmente la trombocitopenia, en algunos casos puede ser necesaria la administración de plaquetas mediante transfusión e incluso puede llegar a ser mortal.