Barcelona es una suma de “curpúsculos” unidos por una parrilla infinita/Madrid, una acorazada almendra encebollada cuyas radiales no logran radiarla / Raíces desde norte, sur y este llevan a una dulce mandorla, haciendo Sevilla, cuyo doble río aísla abruptamente hacia el oeste / Roma es un enorme “corpúsculo” con un tridente por vísceras que, según eterno ciclo, intercambia ser pulpo tentaculador de su territorio debido a los caminos que a ella conducen con ser mancha de aceite que avanza uniformemente.
Écija es una gota de tinta que un soplido ha alargado de norte a sur /Osuna, pulpo que por tuétano tiene los caminos que la originan, dibujando muy heterodoxa textura /Ronda es embudo que se hace joya tras estrangularse en su Puente /Lucena es frágil corazón que se hace cometa celeste avanzando hacia el oeste.
¿Y Antequera?… ¿qué es Antequera? Antequera son caminos que se cruzan dibujando una mariposa /El cordobés eje Cruz Blanca-Santa Clara-Calzada se refleja en el sevillano Infante don Fernando /Y Cantareros y Lucena los unen, los triangulan, y surge pajarita o mariposa, entraña de la ciudad.
Mariposa custodiada en textura generada por el resto de caminos /Mariposa que al abrigarla por el Torcal se hace corazón /Corazón con excrecencia desordenada al oeste /Corazón con excrecencia-tumor industrial-sanitario-residencial al este /Corazón que se va a envolver en boomerang /Boomerang que, desgraciadamente, quizá sea arco con flecha mortal clavada en la Vega.