Hoteles llenos, centenares de deportistas, entrenadores, preparadores, familiares rondando por las calles y hasta un récord mundial es lo que Antequera pudo vivir el pasado fin de semana durante la celebración del XLI Campeonato de España de Atletismo Sub 18 en Pista Cubierta en el Centro de Tecnificación Sexto Centenario.
La atleta española de 16 años, María Vicente, consiguió batir la plusmarca mundial de pentatlón en categoría juvenil, con 4.371 puntos mejorando el registro que poseía la británica Morgan Lake desde 2014 (con 4.284). La catalana logró 8.33 en los 60 vallas;1,75 en altura;13,06 en peso; 6,11 en longitud y 2:22.77 en 800 metros, con tres marcas personales.
La ciudad sigue escribiendo capítulos en la dilatada historia del deporte español. Si hace unos meses Antequera era designada como Ciudad Europea del Deporte 2018, y hace tan solo cuestión de unas semanas el alcalde Manuel Barón acudía a Madrid para recoger el Premio Nacional del Deporte que otorga el Consejo Superior de Deportes, el fin de semana del 10 al 11 de marzo, su Centro de Tecnificación veía cómo la catalana, María Vicente, conseguía batir la plusmarca universal de pentatlón sub 18 en el Campeonato de España de Atletismo.
“Estoy muy contenta y orgullosa, aunque aún no me lo creo mucho”, decía la atleta catalana visiblemente emocionada nada más enterarse de su proeza.
A sus 16 años, María Vicente es ya una de las destapadas promesas del atletismo nacional. El oro en heptatlón que consiguió hace un año en el Campeonato del Mundo sub-18 el pasado verano, en Nairobi, marcó un antes y un después para la atleta catalana, que el sábado volvió a hacer historia convirtiéndose en plusmarquista en la modalida de pentatlón en suelo antequerano tras alcanzar los 4.371 puntos.
Una marca histórica que confirma su progresión a pasos agigantados en el mundo del atletismo y la sitúa como el relevo perfecto para Ruth Beitia, oro olímpico en los Juegos de Río de Janeiro y uno de los referentes femeninos en el atletismo español.
De padre cubano y madre conquense, María se apuntó al atletismo a los 11 años para acompañar a su primo, aunque lo que de verdad le gustaba era el ballet, su gran pasión: “Empecé a bailar a los 3 años, hacía ballet clásico, pero por el desgaste tuve que dejarlo a los 13”.
Ahora ya sólo puede practicar el contemporáneo, el clásico pasó a mejor vida ya que dicha disciplina castiga los pies en exceso.
Aunque lo que de verdad dejó prendada a la catalana fue el atletismo. Tanto le gustó, que cómo no sabía que disciplina elegir, se decantó por hacerlas todas y de ahí, tras muchos años de sacrificio y entrenamiento, pasó a ser la mejor del mundo en las modalidad de heptatlón y hace cuestión de semanas también en pentatlón: “Cuando me lo dijeron no me lo creía, no era capaz de asimilar todo lo que eso significa. Me puse super contenta y lloré de la emoción”.
Del ballet al tartán y récord mundial en Antequera
María comenzó hace cuatro años en el Campeonato de Cataluña Infantil, reventando todos los registros en salto de altura, 150 metros lisos, triple salto y 80 metros vallas. Pero, quién le iba a decir a la catalana que sería Antequera su ciudad talismán.
La joven de Hospitalet que, llegó a la Ciudad de Los Dólmenes en la noche del viernes y se hospedó en el Hotel Antequera, comenzó su participación en el nacional obteniendo una marca de 8.33 en los 60 metros vallas –nueva plusmarca nacional de la categoría–, continuó con 1,75 metros en el salto de altura y 13,06 metros en peso.
En longitud alcanzó los 6,11 metros y completó los 800 metros en 2:22.77, obteniendo un registro final que pulveriza en 400 puntos su mejor marca en pentatlón: 3.923 puntos –récord España– conseguido el 13 de enero.
Olimpiadas en un futuro
María entrena con Fernando Martínez y aunque revela que este año esta focalizada en conseguir medallas en los Europeos de Gyor y Juegos de la Juventud en Buenos Aires, sueña con estar en unos Juegos Olímpicos: “Los de 2020 son un poco pronto, pero no dudéis que entrenaré y lucharé por llegar a 2024”.
María Vicente, plusmarquista mundial: “Que me comparen con la gran Ruth Beitia es un honor, pero también me supone un poco de presión ya que todos esperan mucho de mí, pero cogeré esa confianza y esperanza que tienen en mí para crecerme día a día y dar lo mejor ”.