La Peña Taurina «Los Cabales» ha celebrado un año más su tradicional Pregón Taurino, que en esta ocasión ha sido ofrecido por el aficionado tal mundo del toro y director general de Ordenación del Territorio y Urbanismo de la consejería de Fomento de la Junta de Andalucía, José María Morente del Monte en el Hotel Lozano, durante el mediodía de este sábado 10 de agosto y donde el protagonista ha realizado un recorrido por su experiencia como aficionado desde muy temprana edad hasta la actualidad, ofreciendo una opinión muy particular sobre la fiesta, los toreros y su público.
El acto ha sido conducido por Rosario Palomo, hablando sobre la importancia de ciertos toreros en la historia de nuestro país como Manolete y algunas anécdotas del diestro y el político e historiador Wiston Churchill. Posteriormente, subió al escenario el pregonero del pasado año, Juan Manuel Pozo, recorriendo los pasajes más importantes de la vida de José María Morente incidiendo en su pasión por la tauromaquia.
Ante los aplausos del público, inició sus palabras el pregonero de Los Cabales de este año, quien comenzó detallando sus vivencias desde muy pequeño en los festejos taurinos inculcados por su padre: «la alegría me duro poco porque hubo una época donde prohibieron a los menores de 14 años ir a los toros y pillé un berrinche enorme y me dediqué a buscar libros sobre toros en la biblioteca de mi abuelo hasta que cumplí los 14».
Morente fue desgranando, a través de imágenes y vídeos, década a década la evolución de la fiesta y la importancia de destacadas figuras del toreo haciendo hincapié en Antonio Bienvenida: «era el que más me evocaba el toreo antiguo». El pregonero recordó en la década de los ochenta el repunte del público en su afición por el flamenco y los toros: «Hay una corrida de vitorinos en Madrid que se conoce por la la ‘corrida del siglo’ donde torearon Esplá, Palomar y Ruiz Miguel donde salen todos a hombros y la televisión la repitió 3 veces debido al éxito».
Por otra parte, explicó la evolución de la tauromaquia con el paso de los años «ya que los toros eran cada vez más complicados y los toreros tenían que desarrollar más mecanismos de defensa y además con una crítica muy dura con los toros porque se decía que todo lo antiguo era muy bueno y lo que está en la plaza no vale nada… Los toreros se tienen que adaptar a un toro cada vez más grande y trae sus consecuencias de la muerte de figuras como ‘Paquirri’ o ‘El Yiyo’… A partir de ahí la gente empieza a valorar más a los toreros en la época de Capea y Espartaco y de un torero que para mí marca época como es Paco Ojeda».
Antes de finalizar, ha realizado una comparación del público de las plazas de toros de Madrid, Sevilla y Antequera: «Madríd es la cátedra, muy exigente, aficionados muy duros… Sevilla con un público muy ritual y exquisito y Antequera como la fiesta en estado puro y duro donde la gente viene a disfrutar sin ánimo de examinar al torero ni cumple con un ritual, viene a divertirse que es la mejor manera de entender el toreo».
En el mismo acto, se presentaron los trofeos que se entregarán a los ganadores de las faenas de este año. Más información, edición impresa sábado 31 de agosto de 2019 (pinche aquí y conozca dónde puede adquirir el ejemplar) o suscríbase y recíbalo en casa o en su ordenador, antes que nadie (suscripción).