Se considera de derechas, monárquico y seguidor de la actual Constitución, a la que entiende que es suficiente para seguir el día a día del país. Cataluña es un problema de complicada solución para él y cree que los partidos de la izquierda han hecho volver a las dos Españas con la ley de la Memoria Histórica.
Fue teniente de alcalde con UCD (Unión del Centro Democrático) y presidente del PP (Partido Popular) y participó del Pacto de Antequera como corresponsal del Ideal de Granada. Repasa lo que él vivió en la Transición Española y no esconde ser de derecha, monárquico y constitucionalista. Conversamos con él en nuestra Redacción.
Forma parte de la clase política de la época de la Transición, ligado a la derecha llegando a presidir el Partido Popular. Empezamos preguntándole sobre los jóvenes de hoy, abducidos por el móvil, ¿cómo le podemos decir lo que consiste la Constitución?: “Se define como el marco de la sociedad política organizada por la ley y a través de la ley. Hacer una constitución consiste en hacer una ley que regule institucionalmente el poder político y que está hecha y es escrita con cierto formalismo y refleja la realidad social del país”.
Se habla mucho del consenso que hubo en España. “Cuando muere Franco hay un periodo donde se aprueban una serie de normas, entre ellas la ley de la reforma política, el principio de legalidad, luego estaba el voto, que tenía que ser mayoritario y para mayores de 18 años. También se hizo la legalización del Partido Comunista de España, que fue muy discutido y hubo quien lo interpretó mal y quien protestó. Todos esos principios dieron lugar a que se aprobase la reforma política con lo cual las Cortes de Franco se hicieron el Harakiri, desaparecieron y entonces el paso siguiente era la celebración de elecciones municipales”.
¿De ahí surgieron los padres de la Constitución? “Tras las elecciones municipales, que las ganó la UCD, el paso siguiente era hacer una constitución. Se nombraron siete ponentes, siete padres de la patria, que fueron tres de UCD (Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón, José Pedro Pérez-Llorca y Gabriel Cisneros); uno por el Partido Socialista (Gregorio Peces-Barba), uno por Alianza Popular (Manuel Fraga), otro por el Partido Comunista (Jordi Solé Tura), y uno por Minoría Catalana (Miquel Roca i Junyent)”.
¿Es una constitución vigente hoy en día o hay que reformarla? “En la Constitución hay un título, el X, que es cómo se modifica y es bastante complicado. Lo único que se ha modificado son cosas muy puntuales, como por ejemplo el título preliminar, el título de la corona y el de los derechos fundamentales necesita de un procedimiento muy complicado donde tendrían que ponerse de acuerdo todos los partidos y es muy difícil que lo consigan”.
En los últimos tiempos se expone la necesidad de revisar el tema de las autonomías. “La Constitución tiene un título que trata sobre la organización territorial del Estado. Ahí se reconocían las comunidades históricas: la catalana, la vasca y la gallega… Luego surge la andaluza, pero no consta en la Constitución. La modificación que se quiere hacer es que figuren precisamente las 17 comunidades autónomas con sus estatutos”.
¿Y puede darle salida o solucionar el problema catalán? “El problema catalán yo veo que no tiene solución, porque es un problema para mí un poco absurdo, lo que pretenden es un poco utópico. Cataluña es una región española y lo que tiene que hacer es someterse a España. Que tenga su propia lengua, de acuerdo, pero no como está dándole de lado a la Corona. Cuando los nuevos abogados toman el juramento que se hace en Barcelona, no asiste el presidente de la comunidad autónoma porque va el Rey. Lo que pretenden ya lo tienen, se les reconoce como una comunidad histórica y aún así y todo protestan”.
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Corona y República
¿Qué opina sobre la Corona y la República? “Yo me considero monárquico. Cuando tienes uso de razón y estudias el constitucionalismo español, te das cuentas de que ha habido dos repúblicas y las dos han sido un fracaso. La segunda en teoría podía ser buena, pero empezaron con la quema de iglesias, haciendo barbaridades tremendas, dando lugar a que se dividiese España en un enfrentamiento entre dos Españas. Una vez que muere Franco y el Rey Juan Carlos es el rey de todos los españoles, se llega al acuerdo y se llega a hacer una Constitución. Se olvida todo, hay un pacto, se reúnen Carrillo y Fraga, que son extremos, y se vive en paz y España ha vivido próspera. Ahora, pasar de la monarquía que funciona, no solo en España sino que en los principales países del mundo, tratar de cambiarlo por una república… cuya experiencia que hemos tenido hasta ahora han sido nefastas, ¿para qué nos vamos a exponer si la monarquía ha ido muy bien?”.
¿Hay más diferencias entre la izquierda y derecha del 2021 a la que hubo entre la izquierda y derecha del inicio de la Constitución? “Antes había más diferencias, pero supieron ponerse de acuerdo e hicieron un consenso. Hoy eso resulta que por parte de la izquierda, empezó con Zapatero y continúa con Sánchez, están tratando de hacer la Memoria Histórica y de recordar otra vez y destruir lo que se consiguió, ese acuerdo que fue tan bonito y que le ha dado años de esplendidez a España, parece que lo tratan de romper otra vez y no viene a cuento”.
El Pacto de Antequera
En Antequera hay una fecha importante que es el 4 de Diciembre, con el Pacto de Antequera. Sabemos que estuvo presente. “El alcalde José María González era independiente, yo me presenté por UCD porque siendo de derechas, el ministro Clavero Arévalo, Francisco de la Torre (actual alcalde de Málaga), Ignacio Huelin que fue senador, me visitaron en el albergue nacional de entonces y me hicieron un razonamiento y me dijeron ‘¿por qué no te haces cargo de UCD?’ Yo les digo ‘yo soy más de derechas’ y me razonó, sobre todo Clavero de qué era lo que iba a ocurrir en España y lo calcó perfectamente”.
¿Qué nos puede decir de Plácido Fernández Viagas? “En el Pacto de Antequera intervine más que como político, lo fui como corresponsal de prensa del Ideal de Granada y de la agencia Lobo. Previamente habíamos estado José María González, Manolo Cascales y algún otro antequerano más en Cádiz, porque hubo varias sesiones para conseguir el pacto. Estuvimos en la iglesia de San Felipe Neri. Y luego después el Pacto de Antequera hubo dos reuniones, una en la bodeguita del Museo y la otra fue la más formal, en el salón de plenos del Ayuntamiento. Lo que se reivindicó fue el conseguir la autonomía, no por la vía lenta sino por la vía rápida, para lo cual había que someterlo a referéndum de todas las provincias de Andalucía. Se ganó en todas a excepción de Almería, en la cual perdió, pero aún así se concedió la autonomía”.
¿Qué fue lo que pasó con la capital de Andalucía, porque estaban como candidatas Antequera y Sevilla. “Se ha demostrado que no en todas las regiones la capital principal de la provincia es la sede de la comunidad autónoma, como ocurre en Galicia que es Santiago o en Extremadura, que tampoco es ninguna de las dos capitales. Se pensó que Antequera, que era el centro de Andalucía, debía de ser la ideal. Francisco de la Torre lo defendió, y entonces Alfonso Guerra que tenía mucha sorna, tenía gracia, pero también tenía su mala idea, le dijo a José María González en plan de broma ‘tú tendrías que hacer hijo adoptivo a Francisco de la Torre porque está haciendo méritos en Antequera’, pero luego razonaba que Sevilla tenía más condiciones para montar todas las consejerías y demás, y se llevó el gato al agua y fue Sevilla”.
¿Cómo ve el futuro dentro de 40-50 años? ¿Seguirá la misma constitución, seguirá la monarquía, puede que haya república…? “Creo que habría que olvidar ahora mismo los enfrentamientos que hay, y lo de la memoria histórica que perjudica tanto y que el resaltar lo de un sector en contra de lo del otro crea enfrentamiento. Si eso se puede vencer yo creo que con el tiempo será mucho mejor”.
