La buena andadura de un club de fútbol depende de mucho de la gestión de los recursos que tengas a tu alcance. Desde economía, publicidad o el mero trato diario se mide el buen hacer de cualquier estructura, pero en el fútbol, la cosa se complica algo más, porque el futuro no lo puedes controlar de forma precisa, sólo invirtiendo en él, es decir, en tu cantera.
La positiva marcha del Antequera Club de Fútbol en la Segunda División de la Federación Española hace tener esperanza para que en un futuro no muy a largo plazo, el club pueda dar otro salto y alcance cotas mayores. Desde el club lo saben y por eso están cuidando la cantera, futuro de cualquier equipo y también presente, tal y como se está viendo con los debut de canteranos como Muriel, Sáez o más recientemente Machuca.
Coordinada por Guille Artacho, la base antequerana tiene actualmente dos equipos infantiles, un cadete y un juvenil. El objetivo es aumentar a 6 equipos, es decir, un cadete más y un juvenil más, como hubiera en otra época. Los pimeros son los más pequeños y también representan el futuro de nuestro fútbol.
El Infantil A es el equipo de la cantera que está compitiendo en la mayor categoría, la Segunda Andaluza. Su entrenador es Rubén Casquet, un miembro que lleva muchos años en el Fútbol Base en la ciudad y sabe lo que es tratar y entrenar a jóvenes talentos. Asegura que están trabajando mucho para mantener la categoría, aunque “hay mucho nivel y es difícil. Estamos luchando, los resultados no están dándose, pero estamos todos muy comprometidos, los chicos siguen esforzándose y no pararán hasta que termine la temporada”.
El equipo está en la parte baja de la tabla clasificatoria, antepenúltimos, luchando por salir de la zona. A pesar de que el fútbol se rige mucho por los resultados, Casquet asegura que la gran pretensión del club y de él mismo es “fomar personas en base a valores como el respeto o el compañerismo, en estas edades, la competición pasa a un segundo plano”, nos comenta el míster.
El Infantil B, señal de la gran demanda de Fútbol
El Infantil B también compite y también mira hacia el futuro. La alta demanda de fútbol en la ciudad exigió que hubiera dos equipos infantiles federados y así es. Este equipo lo dirige Fran Alcántara y milita en la Cuarta División Andaluza, concretamente en el Grupo 3, donde para ser su pimer año en Fútbol 11 ocupan una meritoria plaza en la mitad de la tabla. Alcántara señala que el objetivo principal es “aprender a competir, tener identidad, y todo ello aprendiendo a ser deportivos”. En este sentido, el míster asegura que también intenta que “los niños comprendan por qué se juega de una forma u otra y tener claras cuáles son las virtudes y cuáles los defectos”.
El entrenador también señala que las circunstancias de la pandemia no han acompañado a estos chavales, que han estado un año sin poder competir. “Por eso tampoco pretendemos plantear objetivos irreales, no queremos frustrar, buscamos que ellos se desarrollen al máximo como jugadores y personas. Buscamos generarles sentimiento de pertenencia, que sientan que son parte del gupo, eso también es importante en el deporte, que todos estén enchufados y sientan que son parte del equipo, tanto en la derrota como en la victoria”.
Dicho y hecho, los más pequeños del Antequera Club de Fútbol siguen adelante con la máxima ilusión, la misma que se genera tras una época difícil para el deporte federado en estas edades. De hecho, muchos de los chavales que completan esto equipo ni compitieron en alevines debido a la situación sanitaria que vivió el país.
Hay tiempo, eso es lo bueno, para seguir trabajando, entrenando y mejorando, siempre de la mano y el apoyo de sus entrenadores, quienes buscarán lo mejor para su progresión total.
