Desde hace unas semanas, vuelve a lucir el monumento a los Enamorados en la Plaza Castilla. Demasiado tiempo ha tenido esos andamios ante el derrumbe de la base decorativa.
Ahora vuelve a estar como antes. Sólo falta el detalle del agua en la fuente para dar frescor en la calurosa plaza entre la Alameda y el Paseo Real de la ciudad en pleno verano.