Seguramente estará en vías de arreglarse, pero las cabinas, ya que no tienen uso, deben de quitarse del entorno monumental y viario de una ciudad como Antequera.
Así estaba este viernes la que se mantiene frente a la Biblioteca de San Zoilo. Ya no tiene ni teléfono ni línea. Es un lugar de pintadas. Ya que tanto se exige para montar algo, ¿qué pasa cuando no tiene uso?