El Patio de Caballos de la Plaza de Toros se llenó de público en la segunda edición del festival ‘Salga el Rock por Antequera’, dando respuesta al acertado cambio de ubicación y de horas, siendo más en la noche y disfrutando así del rock hasta bien entrada la madrugada.
Tras bandas se dieron cita sobre el escenario de este encuentro que viene a afianzarse, a quedarse en el espacio cultural y de la juventud abriendo el verano de conciertos en nuestra ciudad con rock, luces, jazz y blues.
Junto a las bandas que subieron al escenario, también se preparó, gracias a la colaboración de Mollete Kolektiv, barra de bebidas y también mercadillos con participación de artesanos jóvenes de Antequera tanto de moda y arte, para así completar la oferta de la noche, en la que no faltó también comida ambulante.
Centrados en el panorama musical, Plastic Woods rompió el hielo en la noche con su música y especial mirada al rock progresivo, pero cargado de sonidos del rock más profundo que rompió todas las esquemas y puso el nivel alto nada más comenzar el encuentro.
Le siguió la banda organizadora del festival, Thuggish que interpretaron varios de sus temas más conocidos, pero centrados especialmente en su último trabajo “Sexto Sentido” publicado hace unos meses. En su directo, entregados a sus seguidores y público, mostraron todo su arsenal, entregados al rock y metal melódico, pero dejando pasar el punk y sus múltiples facetas como han hecho en ese último disco.
Su descaro en el escenario, su entrega y pasión por la música sin límites, se notaron en el directo que ofrecieron en mitad de un espectáculo que para cerrar, tuvo a la banda sevilla Gritando en Silencio en directo.
El largo recorrido de esta formación es más que seña de identidad para dejarlos irrumpir en directo, y es que es ahí, donde se sienten más cómodos, sobre el escenario.
Repasaron grandes de sus temas en los que el rock más puro hizo acto de presencia, dejando atrás sus diferentes confluencias y conexiones.
Con ellos, se puso final a una gran noche que ha sentado unas bases profundas para continuar y seguir apostando por este espacio, llevando el rock a Antequera y que le queda mucho y bueno por seguir contando y sonando cada verano. ¡A por la tercera edición!