Un Belén viviente para toda la ciudad, así lo ha conseguido organizar el Colegio María Inmaculada de Antequera que mejoró el ya montado el año pasado. Por las mañanas, visitas de guarderías, por las tardes de las familias y vecinos de la ciudad durante este martes y miércoles en la última semana de clase antes de la Navidad.
Cómo no, un San Francisco de Asís recibe a los visitantes, evocando lo que pasara hace 800 años en Greccio, donde el santo montó el primer Belén y de ahí han pasado ya ocho siglos de tradición.
En el primer patio del colegio, diferentes escenas de la ciudad de Belén, desde una panadería que hace hasta molletes de Antequera, hasta una carnicería, puesto de alimentos, mantecados, guardia romana, coro y una zona de recreo.
Entrada al gimnasio donde los pescadores pescan y los vecinos tienden ropa y dan paso al segundo patio con venta de castañas, Anunciación a los Pastores y un lugar para fotografiarse en familia. Sigue la visita con un establo con animales y el olivo con sus aceitunas.
Se sigue con el recorrido y los pequeños del cole cantan y bailan a ritmo de ángeles, mostrando el camino final al Nacimiento. Y cuando se divisa al fondo el portal, un grupo de personajes ilustres de la ciudad te da la bienvenida. Entre ellos, la Beata Madre Carmen, Pedro Espinosa, José María Fernández, Romero Robledo, Muñoz Rojas o el propio Cristóbal Toral.
Y el Belén, con la Sagrada familia, pastores, y para rematar la visita, el coro del colegio con villancicos que acompañan la visita con las voces de los alumnos y los instrumentos que dan un plus al sonido de ambiente.
Por las tardes, lugar de merienda al término de la visita, para compartir lo que ha parecido la visita de un Belén viviente que se alza como referente en la implicación de toda la comunidad educativa, desde los más pequeños a los profesores. Y tras tanto esfuerzo, la pregunta: ¿cuándo comenzamos a preparar el del próximo año?