No sólo Cambayá Records es reconocido en el mundo del Blues, sino que tienen un hueco más que importante en el mundo del flamenco, y así se quedó patente el pasado sábado 16 de noviembre cuando recibieron el Premio Internacional del Flamenco ‘Manolo Sanlúcar’.
Dieciséis galardones se entregaron en esta novena edición que convoca cada año la Escuela Flamenca de Andalucía que cuenta con 150 delegaciones de la misma por todo el mundo.
Los premiados de esta edición han sido José de la Tomasa (cante), Pepe Habichuela (guitarra), María Pagés (baile), María Vargas (trayectoria), El Taranto de Almería (peña flamenca), José María Castaño (comunicación), Chano Domínguez (instrumentación), Raquel Revuelta (moda flamenca), Faustino Núñez (investigación), David de Arahal (nuevo valor), Festival Internacional del Cante de las Minas (festival flamenco), Gonzalo García-Pelayo (cinematografía), Los Gallos (tablao flamenco), Miguel Marín (promoción flamenca), Mariquilla (docencia) y los antequeranos de Cambayá Records (producción discográfica).
El viernes 15 de noviembre comenzaron los actos con una recepción seguido de una visita a las Bodegas Hidalgo La Gitana, además de varios espectáculos flamenco. Ya el sábado 16, Día Mundial del Flamenco, se entregaron los galardones. Este premio, como sello discográfico reconoce el esfuerzo de esta firma antequerana por la música desde que comenzaron su andadura concretamente desde 1992 en el que comienzan a trabajar con el cantaor Diego Clavel, creando un archivo sonoro de malagueñas, igual que a lo largo de este tiempo han ido sumando y creciendo. Como dijo el presentador en la entrega de los premios, sabiendo encontrar “el equilibrio empresarial y junto a los fines documentales”, unido a la forma de trabajar “es como el de una familia con una cercanía con los artistas que provoca el mejor de los resultados en las grabaciones”.
Agradecimiento al mundo de flamenco
Antonio Blanco recogió el premio de manos del productor y musicólogo Chemi López, dando las gracias: “Lo primero agradecer a los cantaores, guitarristas y músicos que han trabajado con nosotros, que sin ellos, seguramente no estaríamos aquí, cosa que nos satisface mucho porque unir nuestro nombre a la figura de Manolo Sanlúcar es estar ya en la historia del flamenco, nos hace muy felices y nunca lo habíamos soñado». Y añadió un agradecimiento más al mundo del flamenco “que nos haya permitido conocerlo, estar con ellos, vivir muchas noches de trabajo, grabando”.
Ya en Antequera, Blanco nos asegura que esto es un premio de los tres, de Antonio Navarro, Barbra Tromp y él mismo, “nos sorprendió la cantidad de felicitaciones que recibimos de los presentes, nosotros que venimos del Blues, nos quedamos asombrados con tanta gente que reconocía el trabajo que hacemos, de los tres que hemos trabajado solos y a contracorriente”.
Se mostraba contento, no sólo por el premio, sino porque “la gente va conocer nuestro trabajo en el mundo del flamenco, que ha sido un trabajo concienzudo, bastante bueno”. Algo que de sobra sabemos desde hace tiempo, una labor que hacen sin los primeros focos alumbrándoles, pero que terminan arrojando luz en la música, en este caso, en el flamenco.
