Antequera vivió en la noche del viernes 29 de agosto un viaje a la época del esplendor de Santa María y de la ciudad, gracias al concierto que el compositor y director del coro de la Diócesis de Roma, Marco Frisina, ofreció junto a doscientas voces de once coros y la Orquesta Sinfónica Provincial.
Ni la Inteligencia Artificial (IA) podría haber imaginado cómo sería el espectáculo musical por el sitio, el conjunto y el director de orquesta que fusionó temas religiosos con el sonido de bandas sonoras que tiene su sello personal.
Así, a la Orquesta Sinfónica de Málaga, se unieron las voces de los coros de la Catedral de Málaga, Huelva, Tarifa, Jaén, Alonso Cano de Priego de Córdoba, María Inmaculada de nuestra ciudad, Ciudad de Antequera, Escalonías Pueri Cantores de Málaga y los coros de los colegios de nuestra ciudad, María Inmaculada, Nuestra Señora de Loreto y Nuestra Señora de la Victoria.
Se interpretaron piezas con cantos a la alegría y a la fe, la vida de los santos y tras el recorrido musical por la ciudad, culminó con una invocación a la paz mundial y el entendimiento de las naciones, así como dos dedicadas a la Virgen.
La entrada fue libre hasta completar aforo, llenando de inmediato las quinientas sillas habilitadas, a las que se sumaron decenas de personas que buscaron un sitio de pie, entre las columnas, al fondo o en la nave del Evangelio que se quedó libre.
Agradecimientos y el delirio místico dirigido por Frisina
Presentó el acto el concejal de Cultura, José Medina Galeote, quien destacó el concierto que se iba a celebrar, así como el privilegio de contar con un referente musical como es Marco Frisina. Agradeció a los patrocinadores y promotores, pidiendo al alcalde Manuel Barón que le acompañara para entregar un recuerdo a todos los participantes.
Y empezó el concierto. El director Marco Frisina fue introduciendo cada parte del concierto, alabando la singularidad y excepcionalidad de Antequera, ciudad de la que se ha enamorado, destacando la espiritualidad de sus templos, su calles y el sello de las distintas órdenes y congregaciones.
Con ‘La vera gioia’ y ’11 canto del mare’, Frisina presentó sus intenciones tras semanas de ensayos con los coros para preparar este concierto. Un programa que quiso destacar los modelos de santidad como ejemplo de vida cristiana.
Así compartieron: ‘San Pedro y San Pablo’, ‘Tu es Petrus’, ‘Chi ci separen’, ‘La via dei martiri’ (¡sin palabras en este tema!), ‘Sant’Agostino’, ‘Chiara e Francesco’, ‘Aunque es de noche’ y momento especial para el ‘Nada te turbe’ que nos legó Santa Teresa con la guitarra de Javier García Moreno. Quien no lo había hecho.. ya no se pudo aguantar sentir el misticismo que penetraba con sus voces y música, contando con los solistas Luis Pacetti como tenor y Mari Luz Román que hizo de soprano. Y terminó con ‘Pref e risco il paradiso’.
Frisina supo ofrecer sus conocimientos antes de cada bloque y cuando empezaban a cantar, viajabas en el tiempo de la historia, de la religión, incluso de las bandas sonoras. Hubo momentos que no sabías si estabas en Antequera, en ‘La Misión’ o una película de Ennio Morricone. El concierto transmitió paz y unión de los pueblos en unos tiempos donde las guerras siguen presentes en todo el mundo.
Llegaba el último tirón tras más de hora y media de concierto y llegaron las alusiones vaticanas. Frisina es un personaje y consejero con presencia y muy considerado en Roma. De ahí los temas ‘Pacem in terris’ (¡qué canto a la vida y a la unión de las naciones!) y ‘Open the doors’.
Con la emoción por todo el cuerpo y sobre todo el corazón, llegó el canto a la Virgen como ejemplo y camino de la salvación. Con ‘Salve, María’ y ‘Tú, Madre, nos acoges’, se cerraban los ojos para poder conectar con los momentos evocadores.
Y para terminar, ‘Amicizia e volare’ y cambio de programa, optando por ‘Jesuscrist you are my life’, con cánticos del inglés al italiano para elevar a las dos horas de concierto que se recordará por mucho tiempo en nuestra ciudad.
Frisina consiguió devolver el esplendor que tuvo la antigua colegiata de Santa María y recordar que las órdenes y congregaciones religiosas, además de su misión religiosa, también aportan Cultura y humanidad.
Seguramente en estos cinco siglos, Santa María y la ciudad ha podido acoger conciertos de más calidad, momentos más sublimes, voces más impactantes, acontecimientos más hístoricos… pero no los recordamos. Lo que sí vivimos es un acontecimiento histórico e inigualable donde Frisina volvió a sacar la esencia de «la ciudad de Dios que es Antequera», como destacó el alcalde Manuel Barón al principio del concierto.
Marco Frisina (Roma, 1954) es un sacerdote, músico, compositor y biblista romano. Maestro de capilla de la Catedral de Roma y Rector de la Basílica de Santa Cecilia en Trastevere. Un personaje que deja grabada con oro musical y celestial su paso por Antequera.
