El martes 16 de Septiembre finalizaban las Fiestas Patronales de Antequera de 2025 que comenzaron con la Patrona Mariana, la Virgen de los Remedios y terminaban con la Patrona Ganadora, Santa Eufemia.
Durante la mañana y la tarde, devotos se llegaron al templo para rezar ante Santa Eufemia, presidiendo ya su altar mayor y vestida aún como destacó en la procesión del sábado anterior, con nimbo y palma dorados. En el presbiterio, infinidad de ramos y centros de flores que colectivos y particulares le ofrecieron.
Se cumplió el voto perpetuo sellado en 1410 y 615 años después, se celebró la misa más antigua que se desarrolla en toda Málaga. El cabildo eclesiástico estuvo presidido por el vicario y Rector del Seminario, el antequerano Juan Manuel Ortiz Palomo, el arcipreste el trinitario Antonio Jiménez y el carmelita y capellán del templo, también Antonio Jiménez. Mientras que el cabildo civil, el alcalde Manuel Barón (acompañado por su esposa María Victoria Ortiz), el teniente de alcalde Antonio García Mendoza, y los concejales: José Medina Galeote, María Sierras, José Luis Ruiz Espejo y Pilar Ruiz.
También estuvieron la Madre General de las franciscanas de la Beata Madre Carmen, Joaquina González, cuyo coro acompañó musicalmente, así como el gran maestre de la Orden del Infante don Fernando Enrique Ruz, una amplia representación de hermanos mayores de cofradías de Gloria y también de Pasión.
El Alcalde hizo la monición de entrada, los concejales Antonio García y Pilar Ruiz las lecturas. Las peticiones las ofrecieron Carmen Sánchez y Lourdes Repiso, las ofrendas María José Ruiz, así como el hermano mayor Miguel Ruz realizó la acción de gracias y Eufemia Guerrero rezó la oración final a Santa Eufemia.
En la homilía, el Vicario pidió a Santa Eufemia que siga protegiendo a la ciudad y que ayude a los jóvenes a mantener la fe. “Dios supo sacar de aquella joven de Calcedonia lo mejor que había y que vivía en su corazón” en “una dura persecución, una más, de las que se han dado muchas a lo largo de la historia, contra la Iglesia, Dios sacó el hermoso ejemplo de esta santa. Llama la atención por su juventud, en el caso de Eufemia, y por dejar que Dios llene por completo su vida, y lo hace como sólo Él sabe hacer. Porque ese es el verdadero tesoro escondido de nuestra vida, Dios mismo que llena de sentido y de amor nuestra vida”. Se terminó con la veneración de la Reliquia de la Santa de Calcedonia.