Hay muchas formas de ayudarles, de ti y de todos depende realizarlo.
Cuando los bancos y las administraciones dicen que no, siempre está Cáritas. Cuando las familias ya no pueden ayudarles, siempre está Cáritas. Cuando la desesperanza llega, siempre está Cáritas.
Pero… ¿cuándo estamos nosotros? Cáritas es el órgano de la Iglesia que ayuda a los necesitados. Y ¿qué hacemos? Pues que cada uno se lo pregunte y actúe en consecuencia.
Cáritas precisa de voluntarios que acudan a sus parroquias para prestar su tiempo a quienes lo necesitan. Cáritas precisa de recursos de los grupos eclesiales, de las personas anónimas. ¿Hacemos todo lo que podemos?
Nos consta que cada vez hay más ayudas, muchas de ellas anónimas, pero no son suficientes para paliar la necesidad que hay en Antequera. De todos depende, llegar a quienes lo precisan. Nunca sabemos lo que el futuro nos trae.