La Cultura y, especialmente el mundo de la Música, se encuentran en una situación complicada, ya sea por la economía, el ritmo social o la política que se encauza a otros menesteres. Lo cierto es que la sociedad languidece en este sentido. Se necesitan nuevas tendencias y más creatividad para dar salida a grupos, a música que habitualmente se aleja de las líneas comerciales que llegan a todo el mundo y que se mantienen gracias a grandes productoras musicales. En ese terreno, dando la oportunidad a quienes habitualmente no tienen las puertas abiertas, está Cambayá Records, empresa antequerana que presenta un nuevo espectáculo de Flamenco.
Entre las rendijas de las ventanas de mi casa habitualmente se cuelan sonidos del día a día, entre ellos, la música que bombardea nuestro oídos con éxitos comerciales o productos inexplicables que nos mete internet en un click.
Logro encauzar esta situación gracias a la música que alienta mis sentidos, ya sea de mi propia colección o la que los amigos me hacen llegar. Y entre ellos, siempre hay oportunidad para algún tema que para muchos es desconocido. Este maravilloso mundo de la música está lleno de amantes de lo que no es superficial, de lo puro, de lo real, de la Música con letras mayúsculas. En ese pequeño espacio que se les presta, está la productora antequerana, Cambayá Records, que no se cansa de brindar la mano al jazz, blues y el flamenco, verdaderas joyas hoy día.
Por ello, el próximo viernes 25 de enero presentan en el Teatro Municipal Torcal un nuevo espectáculo, “Flamencos de Corazón”, una cita en la que promocionarán dos de sus discos, el de Luis Perdiguero en la presentación de su disco en Antequera “Canta a Muñoz Rojas” y del guitarrista Antonio Soto con su nuevo disco “Rosas Blancas”.
En el caso del primero, más de un año hemos tenido que esperar en su ciudad para verlo presentar, este trabajo donde pone el quejío del flamenco a los poemas de José Antonio Muñoz Rojas. Y en el caso del segundo, presenta su segundo lanzamiento, que produce Cambayá.
Antonio Blanco, productor ejecutivo de ambos, nos habla de esta interesante cita: “Es un espectáculo donde va a estar la guitarra clásica flamenca y va a ver un poco de lo que se está haciendo con la nueva guitarra en España dentro del Flamenco, gracias a Antonio Soto. Y también habrá cabida para el flamenco puro de Luis Perdiguero con las letras de Muñoz Rojas. Este proyecto lo presentamos aquí y se va a poner en funcionamiento en todos los teatros que podamos. Vamos a presentar los dos discos con la actuación de los dos artistas. Se comenzará con Antonio Soto en primer lugar, que lo hará acompañado de percusionistas, cantaora y palmeros. Y la segunda parte, se centrará en la guitarra y voz ortodoxos, con Perdiguero”.
Nuevas tendencias y apuestas por un mercado, el de Flamenco, que aunque conocido por todos, sigue estando reservado para unos pocos. Por ello, el disco de Antonio Soto, que sale ya a la calle, es una muestra más de ese apoyo a artistas que sin sellos discográficos y productoras de este tipo, no podrían sacar el trabajo. “Soto es un guitarrista joven que está aportando cosas nuevas a la guitarra flamenca. Es un guitarrista que como acompañamiento tiene hechos sus deberes, es el guitarrista oficial de Fosforito y El Agujetas. En esta ocasión va a dar su “do” de pecho en solitario. En el disco hay palos puros dentro de la guitarra flamenca; luego, hemos metido bajo y batería, la fusión en sí. Él aporta sus melodías, un conocimiento del Flamenco muy profundo, que se nota en el añejo puro en su forma de tocar”, nos dice Blanco sobre el disco “Rosas Blancas”.
El Flamenco no se está quieto. El disco de Perdiguero permitió llevar los poemas de Muñoz Rojas a un lugar donde puede que ni siquiera conocieran quién era este poeta, y ahora, con Soto, se abre la posibilidad de fusionar lo estrictamente puro, con la actualidad.
Por tanto, el próximo viernes a partir de las 21 horas en el Teatro Municipal Torcal, el espectáculo dará que hablar mucho.
Pero la música no se para nunca, y aunque volcados ahora con este “Flamencos de Corazón”, desde Cambayá siguen con su actividad. Están inmersos en el nuevo trabajo de Diego Clavel, y en el Blues y Jazz están finalizando dos discos que fueron grabados en su día en el Cambayá Club de Blues, así como ultimando los retoques de lo nuevo de Los García, un recuerdo a los grupos de los años 60.
Música, como decimos, que está en el margen ése que interesa más bien poco, pero que hace mucho por la Cultura: “Las cosas que no son comerciales y que no tienen beneficio económico, sí que tienen un beneficio cultural a largo plazo que es interesante. A la gente le gusta lo comercial y es normal, pero no podemos olvidarnos de estas cosas”.
Estamos seguros de algo, y es que Cambayá siempre ha estado unido a la parte más alternativa de la música; son ese punto “no comercial” de la Cultura en Antequera: “el ser humano tiene la inquietud de hacer cosas nuevas, hay que allanar el camino a aquéllos que no tienen medios para seguir. Somos necesarios y la verdad, nos sentimos muy a gusto ”, nos dice Blanco.
Nos alegramos de que sigan siendo esa alternativa, y aunque no en primera línea, nos sigan brindado grandes citas musicales que sin ellos, dudamos que se pudieran hacer.
Antonio Blanco: “Está situación nos está dando creatividad. Dinero puede que no haya, pero ideas no nos faltan”
Antonio Blanco no sólo se dedica en Cambayá Records a la producción discográfica, sino que siempre está lleno de inquietudes, buscando nuevos caminos para la música, especialmente para el flamenco, blues y jazz, materias en la que son especialistas.
En Antequera, hace tiempo que lleva funcionando el Cambayá Club de Blues, donde tienen una programación mensual con actuaciones, con una asociación en la que cuentan con ochenta socios y más de trescientos simpatizantes. Para sus conciertos tienen no sólo músicos de calidad, sino que el público juega una baza muy importante, que comienza a crecer en su espíritu crítico a la hora de escuchar lo que se les presenta. Habitualmente para cada cita cuentan con una media de público de cincuenta a setenta personas, que disfrutan de una agradable velada, que los músicos aprecian y por ello, les gusta Cambayá. “Los artistas quieren expresar lo que hacen y es necesario que el público tenga cierto rigor a la hora de escuchar. La calidad tiene que estar en todo: en el público, la infraestructura y los artistas”.
Pero no sólo en este Club tiene cabida el blues y jazz, sino que se abren a otras músicas del mundo. “A través de nuestro socio Chipi, vamos a abrir la puerta para que se cuelen grupos emergentes como ya ocurrió en el invierno y volverá a repetirse con la actuación de The Incredible Shouting Market y Santos de Goma que actuarán juntos aquí. Estamos abiertos a otros tipos de música. Está situación nos está dando creatividad. Dinero puede que no haya, pero ideas no nos faltan”.
