Unos de los puntos que han recibido mayores elogios en la pasada Semana Santa, por parte de los visitantes llegados a nuestra ciudad, se los llevó la “nueva” Plaza de San Luis, reacondicionada hace poco por el Ayuntamiento y su Delegación de Obras, dándole otro “aire”, sobre todo con la presencia de la soberbia escultura-monumento del Capitán Moreno, obra de nuestro paisano Paco Palma.
El aspecto de esa plaza, una de las centrales de Antequera, con el monumento y sus alrededores, sus arriates de flores y los bancos para que puedan sentarse quienes pasan por allí, delante del bello edificio de San Luis, y embocando la calle Infante don Fernando con el incomparable fondo del Palacio Consistorial y, más lejos, las torres de San Agustín y San Sebastián, mientras allá arriba “El Reloj”, sencillamente soberbio, preside la estampa, como hace en tantos puntos de la ciudad.
En la foto que publicamos al lado, cómo estaba esa Plaza de San Luis, hacia 1940, con la farola central que luego el Ayuntamiento colocó en Villanueva de la Concepción, las farolas rematadas por tulipas de cristal, que enseguida la gente llamó “frascos de farmacia”, el suelo sin asfaltar y unos arriates –que ésos sí que los echamos de menos–, en los laterales.
A la entrada de la Avenida que llevó el nombre de General Varela, grupos de paseantes “tomando el sol”, y la maravilla de aquel tranquilo tráfico rodado, representado por dos automóviles de la época, uno saliendo de la calle Cantareros y otro de la calle Infante, en la que no se divisa ningún otro vehículo.
En la foto que publicamos al lado, cómo estaba esa Plaza de San Luis, hacia 1940, con la farola central que luego el Ayuntamiento colocó en Villanueva…
A la derecha de la vieja fotografía, se nota el solar sobre el que se edificó la Casa de Juzgados, enfrente del cual se encontraba el Garaje Alameda, unos surtidores de gasolina, y más abajo el recordado Bar Alameda, con sus veladores sobre la acera.
