Este lunes 1 de julio, fallecía, víctima de una larga y cruel batalla contra el cáncer, soportada cristianamente con la ayuda de su esposa, hijos, familia y muchos amigos, el industrial don Francisco de Asís Lozano Lozano, empresario que fuera de la acreditada familia del Hotel Lozano, uno de los señeros de nuestra ciudad, así como presidente que fue del Centro de Iniciativas Turísticas de Antequera.
Precisamente por el tiempo en que llevaba haciendo frente a esa dolencia, la noticia de su fallecimiento causó profundo pesar en la ciudad, donde era persona querida y admirada, que gozaba de infinidad de amigos, como perteneciente a una familia ejemplar, emprendedora y luchadora, que hoy es un gran complejo hotelero habiendo nacido de un modesto bar.
Cercano en el trato, simpático y amable, siempre con una sonrisa en los labios, Paco Lozano, como le llamaba todo el mundo, se granjeó una enormidad de amigos en todos los ambientes de nuestra ciudad y de fuera de ella, se sintieron profundamente la triste noticia, como se puso de manifiesto en la visitas al Tanatorio y en el sepelio, verificado en la tarde del martes, con la Iglesia Mayor Parroquial de San Sebastián abarrotada de familiares, amigos, compañeros del gremio, personas que le agradecían su impagable labor por su tierra.
Desde estas líneas, pedimos a Dios le conceda eterno descanso, como el buen hombre que era, y resignación a su esposa María Elena, a sus hijas Elena María y Sara, a sus padres en forma especial a nuestro querido amigo Juan, hermanos, nietos y a los muchos amigos que lloran la pérdida de un gran antequerano, ejemplar esposo y padre de familia, como ejemplar industrial fue toda su vida.
Su familia nos pide agradezcamos el magnífico trato que le han ofrecido en su batalla los servicios médicos, sobre todo en nuestro hospital en sus últimos días.
Ahora, descansa ya seguro en el Cielo, donde habrá recibido la bienvenida de su amigo Juan Manuel, con quien compartió los mejores años de su vida, en pro de sus familias, de su amistad, del Turismo en Antequera (base de lo que hoy se vive)… y ahora lo realizan ya allá arriba. Que el Señor les dé paz a ellos y a sus familias y amigos acá en la tierra de Antequera.