Antequera ha comenzado la jornada de la Huelga General de hoy miércoles 29 de septiembre como un día normal en la mayoría, salvo en algunos puntos comerciales y de administraciones públicas, según hemos comprobado a primera hora de la mañana.
Pronto comenzó la jornada de la Huelga, a las 1 de la madrugada, con caravanas de coches, pitando, tirando panfletos a las calles y pidiendo a los establecimientos hosteleros de la Alameda que cerraran.
De madrugada, muchas vueltas por la zona industrial, donde el respaldo de la huelga no ha sido como otras veces, y donde los que han ejercido su derecho a trabajar, han buscado rutas alternativas para esquivar los llamados piquetes informativos.
Entre las 3 y las 4 de la madrugada, intentaron boicotear el Centro de Distribución de Mercadona, donde tuvieron que precisarse la mediación de las autoridades policiales.
A las 8 de la mañana, quienes aún estuvieran en la cama, se despertaron con la pitada de los coches por el centro de la ciudad. Muchos comerciantes se han encontrado con pegatinas pegadas (como la de la foto de la portada) en sus comercios, sin dejar constancia de quién la ha colocado. Éstos se han mostrado indignados por la coacción.
El Mercado de Abastos ha secudando por completo la Huelga General, sin abrir ningún puesto. Los bares del centro, están todos abiertos, salvo uno que tenía la puerta encajada, esperando ver qué pasa. Los colegios han iniciado su actividad normal, salvo en el Pedro Espinosa, donde se han encontrado silicona en las cerraduras de algunas puertas. Y entre las 10 y las 11 de la mañana se comprobará lo que hará el resto del comercio.
Por las calles, transcurrir diario de vehículos comerciales, así como de gente de a pie. Los bancos y cajas abiertos sin problemas.
En las próximas horas les iremos informando de cómo va transcurriendo la jornada de la Huelga General, que de momento no tiene un respaldo general.
Hay muchos comerciantes que han recibido estos días las visitas de los sindicatos, manifestándonos que si cerraban, es más por miedo a represalias que por respaldar la huelga, al considerar que bastante están mal las cosas, como para cerrar un día entre semana.
