El proceso de creación artística tiene numerosas vertientes, un abanico amplio al que muchos jóvenes hoy día quieren dedicarse y encontrar su futuro en él. Precisamente, hablamos con María Aguilera (Cartaojal, 15 de marzo de 2004), actriz y escritora, que desde pequeña sintió la necesidad de adentrarse en el mundo de distintas disciplinas artísticas.
Música, danza, interpretación caminan a su lado, y también la escritura, porque en ella crece una semilla creadora, inspiradora con raíz firme que la lleva por estos caminos. Ha plasmado lo que es para ella dedicarse a dicho mundo artístico y quiere que sirva para muchas otras personas que se encuentran en la misma situación que ella.
El 12 de julio publicaba este libro que es un “cuaderno creativo”, titulado: ‘Estoy aquí por si te pasa’. Explica que no sólo está dirigido “a personas creativas ni artistas, sino que está muy enfocado en la generación Z, porque yo pertenezco a ella. Creo que tiene matices y temas muy importantes en la sociedad actual, como el mundo digital, lo que encuadra la autoestima cuando estamos mucho mirando redes sociales, la comparación”.
Enfocado a esa parte digital, pero basado en su propia experiencia personal y artística: “Yo pensé que en el cuaderno cuando era bastante pequeña, en el colegio, y me di cuenta que eran escritos que a lo mejor otras personas podrían sentir lo mismo que yo y nunca lo habían sabido expresar. Yo el cuaderno cuando lo terminé, no lo saqué porque me daba mucho miedo, entonces lo dejé aparcado y empecé con un podcast que ahí me veía más segura”.
La corriente artística camina en ella y busca salida, expresarse, y ahí llegaron ocho episodios, con el mismo nombre que el cuaderno, disponibles en Spotify, que confiesa ha sido una gran experiencia: “Ha sido un viaje muy bonito, muy íntimo, y al contrario del cuaderno que el cuaderno que está pensado solo para lectores”. Unos episodios con los se ha encontrado muy cómoda y más segura: “Yo personalmente soy una persona súper tímida, pero luego voy a poner a lo mejor delante de una cámara y como actriz me desenvuelvo mejor, encontré en el podcast esa seguridad que a lo mejor en el libro todavía no la había encontrado”.
A partir de esas escuchas de sus episodios, se animó a publicar el cuaderno ante la buena respuesta de aquellos que lo escuchaban “la verdad es que mucha gente me decía ‘oye, me he sentido súper identificado, sigue haciéndolo…’ y entonces, a partir de ahí dije pues a lo mejor sí que voy a sacar el cuaderno”.
https://youtu.be/xAVeYjcKC5g
El origen de esa inquietud artística
Ella se define perteneciente a la Generación Z, que han crecido con la corriente digital, que se da en ella, pero también con más inquietudes.
Aguilera apunta que desde pequeña “era súper creativa y no sé, siempre he sido como muy independiente también, pero a nivel soñador”; confesando que es bueno soñar, pero no tanto, . En ese crecer “primero hice música, luego encontré la danza o sea es que toda mi infancia y adolescencia está encaminada al arte entonces luego cuando llegó la interpretación fue como guau realmente necesito hacer esto en mi vida y o creo que a partir de ahí todos los ámbitos relacionados con el arte y me gustan, me atraen”.
En su faceta como actriz leva poco tiempo “pero lo poco que he hecho me ha llenado” y explica, “he sentido un respeto brutal por cada trabajo que he hecho relacionado con esto de la interpretación” ha trabajado en un spot publicitario para “Dunkin Donuts, videoclips, también he estado en cortometrajes, que la verdad es la experiencia brutal, también he estado en Netflix, ‘La chica de nieve’ y también súper guay”.
Se topó con todo gracias a una compañera en las clases de danza, una chica le habló de ello “y me dijo vente conmigo, pues me fui y fue un acierto” un mundo nuevo en el que se encontró a ella misma “era un poco contradictorio, pero cuando actúo, soy más yo que nunca, pero a la vez no estoy siendo yo porque es un personaje construido”.
Con todas estas facetas rodeando su vida, le pedimos que se autodefina “intensa y creativa, como un culo inquieto”, nos dice entre risas. Pero gracias a esa intensidad por probar disciplinas ha llegado a este punto “me encontré en la escritura como algo liberador, diferente a la danza, diferente a las cosas que ya había explorado artísticamente”.
“Yo tenía escrito desde hace muchos años y nunca me había parado a leerlo. Entonces, desde ahí me animé a comunicarlo para poder ayudar, no salvar, sino ayudar, acompañar a gente que a lo mejor pueden sentirse identificados”. Una herramienta que ojalá hubiera tenido ella en sus manos “lo primero que pensé fue que ojalá yo, cuando era más pequeña, hubiera tenido algo así, algo que me ayudara, no como una especie de guía, sino como acompañamiento”.
El futuro no sabe qué proyectos le depara “pero lo único que sé es que realmente, un artista debe hacer algo desde el corazón, desde el alma que le llene, porque yo creo que un artista que a lo mejor crea desde el marketing o desde el negocio, realmente pierde su esencia y lo pierde todo. Así que no sé qué voy a hacer, pero desde el corazón seguro”, buenas y firmes convicciones.