La violencia contra la mujer es uno de los grandes problemas que se sigue viviendo hoy en la sociedad. Violencia que en muchas de las ocasiones terminan en asesinatos, no sólo de ellas, sino también de los hijos, haciendo de la violencia vicaria una consecuencia más de este gesto absoluto de dominación y control desmedido.
Antequera, al igual que distintas poblaciones del país, vive este martes 25 de noviembre, el Día para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, por ello, entrevistamos a la concejal de Equidad y Familia del Ayuntamiento de Antequera, María Sierras Conejo, que nos atiende en su despacho junto al Centro de Información de la Mujer.
María Sierras invita a toda la ciudadanía y centros educativos a participar en la concentración y lectura de Manifiesto que se realizará en el Patio del Ayuntamiento este martes 25 a las 12 horas, porque considera necesario que “alcemos nuestras voces, cómo no, todos juntos, porque al final la unión hace la fuerza y vamos a hacer la lectura del manifiesto, poniendo en común esta grave problemática, y que todos juntos tenemos que seguir avanzando para poder llegar a un momento en el que la podamos eliminar y erradicarla por completo de nuestra sociedad”.
Desde su área, y en concreto, desde el Centro de Información a la Mujer (CIM) presentaron los datos de este año de mujeres que solicitaron información al respecto, sobre ello deja claro que se tiene “que seguir creando conciencia, que esto no es algo que tenemos que aparcar y tenemos que seguir trabajando, y sobre todo, con nuestros jóvenes que al fin y al cabo son muy importantes, son la base de una sociedad creo que bastante igualitaria y a partir de ahí tenemos que seguir, no podemos parar”.
En este punto recordamos que fueron 79 mujeres las que solicitaron ayuda, y que en el perfil con edades entre 30 y 39 años, aumentó esta demanda. Por ello insiste en la importancia de trabajar con los jóvenes en edades cada vez más tempranas: “Es básico. Cuando somos pequeños, somos esponjas. Entonces, es necesario que desde la base, desde las propias casas también, desde la propia educación de base que nos dan nuestros padres y nuestras madres, hagamos esa estructura para crear una sociedad que podamos ser más igualitarios, que todos nos podamos respetar y que al fin y al cabo, pues creamos conciencia en nuestros más pequeños de que son situaciones, son problemas que se pueden dar en un futuro”.
Por eso es “fundamental esa prevención y esa concienciación social que tenemos que seguir haciendo. Desde el Centro de Información de la Mujer, seguimos, por supuesto, atendiendo a todas las mujeres que vienen aquí, pidiendo esa información, pero también, cómo no, trabajando en la prevención; es algo que es esencial, que no se nos puede olvidar y que tampoco las administraciones deben de olvidarse que la prevención y la formación es básica para trabajar en el contenido”.
El trabajo y talleres con los más jóvenes
En esa prevención ponemos nuestro foco. Desde su área han realizado talleres con alumnos de Sexto de Primaria y Secundaria, nos detalla el trabajo realizado con ellos. “Hemos estado hablando con ellos, porque yo también he acudido a esos talleres, siempre me gusta formar parte y ver cómo se organizan y ver cómo también los chicos y las chicas reciben esa información que nosotros le damos”.
Aunque no lo parezca “ya empiezan a ser muy conscientes, son maduros para la edad que tienen y la verdad que hay que seguir hablándoles con esa naturalidad de la situación, también adaptándoles a la propia edad que tienen”. En los talleres de Sexto de Primaria han hablado por ejemplo de las “relaciones sanas para un futuro sin violencia. Ahí hemos empezado a darle esos pequeños consejos sobre cómo detectar relaciones tóxicas, obviamente también de pareja, pero en ese sentido es también extrapolable a las relaciones de amistad que empiezan a tener con esas edades. Al fin y al cabo, en la vida, cuando uno va avanzando, uno va creciendo, pues te vas encontrando con diferentes situaciones. Entonces sus primeras relaciones son de amistad y ahí ya empiezan pues a tener esos celos a veces, ese control, esas amistades quizás un poco más tóxicas. Si empiezan a partir de ahí a darse cuenta, a detectar, luego cuando en un futuro lleguen a esas relaciones de pareja, pues sí sabrán cómo detectar, y echarse para atrás, aparcarse y poder tomar conciencia de la situación en la que se pueden encontrar”.
Para los alumnos de Cuarto de Secundaria, los veinte talleres impartidos han estado enfocados en otros campos impartidos por una psicóloga y un trabajador social: “Hemos hablado de sexualidad sana, de afectividad, de respeto, de consentimiento. Es muy importante que ellos también sean conscientes del momento en el que se encuentran que empiezan, quizá a tener esas primeras relaciones, y a veces, pues hay quizá una línea un poquito más fina. La tecnología también está haciendo más daño en nuestros adolescentes. Creemos que es esencial trabajar la empatía, el respeto, el consentimiento y de crear conciencia en ellos de lo que está bien, de lo que está mal, de lo que es real y de lo que no es real, porque ya empiezan también quizá, con el consumo de pornografía, nos guste o no nos guste”, así lo demuestran los informes.
Por esta razón “tenemos que estar trabajando con ellos, pedirles lo que tiene que ser y lo que no debe de ser. Para nosotros es fundamental trabajar con esa prevención y dándoles esos consejos con profesionales que sí saben de la materia y que podamos hacerles el bien, que para eso lo hacemos”.
Muchas de esas mujeres jóvenes, adolescentes incluso menores de edad, llegan también al Centro de Información a la Mujer: “Sí, la verdad que sí, pues para eso, aparte del Centro de Información de la Mujer, trabajamos con menores que se hayan podido encontrar en una situación de violencia de género. Tenemos un servicio que está más especializado, una psicóloga que se encarga de trabajar con las menores en este caso, y luego, cómo no, con nuestra psicóloga del Centro de Información de la Mujer que se encarga de esas personas, ya en edad más madura, que ya no se consideran menores y que les da ese refuerzo por parte psicológico”, cuando llegan a dicho espacio.
La atención privada desde el CIM
En el CIM no sólo se ofrece esa atención psicológica a las mujeres, sino que también llegan esas parcelas que son totalmente necesarias atender, desde el ámbito jurídico, a la atención social. Es un trabajo conjunto, que tiene también un trasfondo importante. “Tienen que tener una parte humana que es muy importante con este problema y la verdad que la tienen. Cuando ellas vienen aquí, pues sienten esa seguridad porque tenemos que mostrarle esa seguridad de que cuando van a exponer un problema tan grave como es sufrir violencia de género, tú vienes con muchísimo miedo, no sabes muchas veces qué tienes que hacer”.
Importante esa privacidad “para nosotros es fundamental que lo tengan clarísimo” y a partir de ahí “tenemos asesoramiento jurídico, que tan importante es el trabajo también de la abogada que le plantea la situación y ella pues ya le plantea cómo enfocarlo. Si necesitan prestaciones sociales, pues para eso está la trabajadora social, si necesitan más información, para eso está la informadora, si necesitan esa parte de orientación laboral, para eso está la orientadora laboral, si necesitan ese refuerzo psicológico, porque el refuerzo psicológico yo creo que es algo esencial, fundamental, que es lo que te hace avanzar y dar ese paso para poder denunciar”.

Coordinación entre los servicios de Antequera
Un trabajo conjunto realizado entre todos los componentes del Centro: “Es fundamental que todas las piezas que forman parte de este puzzle todos vayamos a una”, porque es necesario para que “esa protección sea integral, que al fin y al cabo es lo que desde el Centro de Información de la Mujer se ofrece, esa protección integral”.
Pero además esta gran coordinación no sólo depende de este espacio, sino también está la conexión con la Policía Local, Nacional, Guardia Civil, Juzgados y Centros Sanitarios: “Es básico porque al fin y al cabo seguimos dando esa protección integral a esas mujeres. Nosotros le estamos dando esa seguridad. Ellas se tienen que seguir seguras. Si ellas no tienen seguridad para dar ese paso, ¿cómo lo hacen? Es muy fácil decirlo, pero verse en la situación de ellas no tiene que ser nada fácil”. Una labor en la que “todos tenemos que estar a una y ya te digo, es también muy necesaria esa parte humana”.
En este apartado de seguridad no podemos dejar atrás los fallos que ha habido en el sistema de las pulseras antimaltrato que ha afectado a muchas de mujeres. En Antequera se cuentan con dos pulseras y deja claro su preocupación: “Es algo grave, sinceramente, es algo que tiene mucha relevancia porque yo me pongo en el pellejo de ellas que llevan pulseras y no saben si están funcionando como debiera de funcionar; me daría más miedo todavía. Porque no sabes la situación, te encuentras al fin y al cabo desprotegida. Nosotros, como tú bien has dicho, tenemos dos pulseras de seguridad, que sí han tenido fallos. Entonces, pues la verdad que hay que ser responsable con ese tipo de cosas. Yo que estoy en este momento actual como responsable político, creo que es necesario que pidamos responsabilidades, las que sean. Las mujeres no se pueden sentir desamparadas en ese sentido, no con esos fallos en las pulseras”. Por ello ve necesario que se “busque una solución porque es muy fácil verlo desde fuera, pero una persona que está dentro viviendo esa violencia de género no se puede sentir así” para que “esas mujeres no sientan esa desprotección en ese momento”.
Hay que dejar claro que cuando se tiene una pulsera, ya ha habido una denuncia, una orden de alejamiento y si ese sistema “no está detectando la señal que debería, y que se la da a la policía para que detecte… Creo que ahí se debe de revisar y se debe de ser consciente y responsable del problema y exigir una solución ante eso”. Y hace hincapié en que no importa la cantidad de pulseras erróneas, “da igual las que sean, con que haya una, creo que no debe de pasar”.
Para cerrar esta entrevista, destaca el lema que el próximo martes 25 se escuchará en el Ayuntamiento: “Actúate, muévete por los buenos tratos, así es nuestro lema, nuestra campaña del 25N. No podemos estarnos quietos. Es necesario que sigamos poniendo voz, haciendo estos talleres, esta prevención, esta sensibilización, esta concienciación social. Que sigamos trabajando, que todas las administraciones debemos de ir a una, que eso es fundamental, que haya una buena coordinación y que no debemos olvidarnos de que sigue siendo una lacra social”.
Algo que afecta a todo un entorno familiar y por tanto “debemos de dejar una sociedad que merezca la pena para nuestros jóvenes, son nuestro futuro y tenemos que creer en ellos y tenemos que allanarles el camino y ayudarles” porque así con ese trabajo y prevención podremos dejarles “un mundo mucho más bonito y que merezca la pena”.






