El interior de la iglesia parroquial de La Trinidad va a ser remozado: pintando todas sus paredes, limpiando sus retablos y recuperando la capilla quemada por el incendio del año 2000, según nos comunica su párroco el trinitario Antonio Jiménez.
Una reforma que será financiada por el Ayuntamiento de Antequera y que desde este jueves se está acometiendo por parte de la empresa local Chapitel. Se han cerrado inicialmente la dos naves laterales y el culto se mantiene hasta el 3 de noviembre, día en el que se trasladarán las misas al interior del convento hasta mediados de diciembre, fecha prevista para la finalización de las mejoras.
“Tras un tiempo de intentar llevar a cabo este proyecto, han comenzado las obras de pintura del interior del templo” que se esperaban desde julio del 2000 cuando un incendio destruyó una capilla y dañó imágenes, retablos y cuadros, así como oscureció el interior.
Será un mes y medio de mejoras, para lo que hasta que pasen la festividad de los titulares de la Cofradía y el día de Todos los Santos y Difuntos estará la nave central disponible. El día 3, el culto de misa se trasladará al salón de actos conventual.
La pintura llevará a la limpieza de todos los retablos, así como del traslado del lienzo de “Santa Inés” de Antonio Mohedano a la capilla incendiada, siguiendo las recomendaciones artísticas de Jesús Romero, quien ha expuesto la mejora del templo en el lugar afectado por las llamas, dando valor a este cuadro que estaba en las dependencias conventuales.
Para Navidad, los fieles tendrán un remozado templo que ya piensa en la mejora de los bancos y el suelo.
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