El Ayuntamiento de Antequera ha entregado este miércoles 10 de diciembre a Rosi Morón Trillo, el XVI Premio a la Solidaridad, en su edición de 2025 en reconocimiento a su trabajo en defensa de los derechos y la inclusión de las personas con discapacidad, en acto celebrado en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Antequera.
En un acto sencillo, directo, emotivo, sincero… se ha reconocido a una mujer que es madre, un ejemplo de luchadora donde ante la adversidad siempre ha mostrado sus ganas de vivir, de agarrarse a lo que pudiera y, cuando lo supera, sigue en la lucha por los que inicien el camino que ella ha pisado.
El acto contó con la presencia de sus familias, amigos, colectivos sociales y representantes de todos los grupos municipales. Lo condujo el teniente de alcalde Alberto Arana, quien expuso que Rosi no ha tenido una «historia fácil, ha tenido que luchar con una enfermedad, ha tenido que luchar con problemas que han ido obstaculizando a su familia», pero nunca se ha venido abajo.
Tiene dos hijos: Ángel y Adrián. «Ángel, su primer orgullo en esta vida. Después nació el torbellino de Adrián, que nada más nacer le dan la noticia de que tenía el síndrome de down. Al principio fue un jarro de agua fría, pero después, como en todo en su vida, Rosi saca su fuerza, busca la manera de luchar y con una sonrisa y mucho amor, transforma en positivo todo aquello que lo rodea».
En 2017 «la vida la puso más pruebas, le diagnosticaron cáncer de mama. Entonces comenzó una época inmersas en radioterapia, quimioterapia, operaciones y muchas pruebas médicas que no tuvo más de tener que luchar incansablemente». En esa misma época, «había comenzado su andadura como presidenta de CASIAC, realizando todas las gestiones que podía desde su casa debido a la enfermedad». «Con su pañuelo en la cabeza, con su labor y con su sonrisa por bandera, comenzó una época en la que CASIAC tomó una gran importancia».
Seguidamente, el Alcalde y Arana le entregaron el premio, llamando a su hijo Adrián para que se lo entregara. El público en pie, emoción de Rosi y todos los presentes y vuelven a su sitio para ofrecer su discurso.
De las gracias de Rosi a la emoción del Alcalde
Ante el atril, la galardonada agradeció a todas las personas que han hecho posible que le concedan el premio. «Este premio no es sólo un reconocimiento a mi labor, sino a todas las personas que han trabajado junto a mí para conseguir una ciudad para todos, una ciudad de todos para todos, o al menos lo hemos intentado».
Recordó que «después de un tiempo implicándome en las actividades que se llevaban a cabo desde la entidad y de haber pasado una etapa más complicada por mi cáncer de mama, me propusieron en 2017 si quería asumir la presidencia de CASIAC». Fue cuando «decidí tomar el toro por los cuernos y así he estado ocho años, siendo la cabeza visible, pero con un grupo de personas que han estado junto a mí».
Dio las gracias «a mi familia, que siempre han estado ahí, porque mientras yo ayudaba a los demás, ellos me ayudaban a mí cuidando a mis niños. A mi hijo Ángel, gracias por ser como eres y demostrar tu madurez, responsabilidad y esfuerzo. Este año ha sido un año muy difícil para Adrián y para mí, pero como todo llega, todo pasa, y poco a poco vamos volviendo a la normalidad. Agradecer el cariño de todos y sus oraciones que han tenido que ser muchas. Gracias Adrián, por supuesto, por tu valentía y ser el mejor ejemplo que puedo tener y sacarme una sonrisa aún en el peor momento».
Tras una nueva fuerte ovación, cerró el acto el alcalde Manuel Barón, quien dijo de Rosi: «Hablar de Rosi es hablar muy fácil, porque es tan buena, es tan bondadosa. Pero claro, se hace muy difícil. ¿Por qué? Porque a medida que vas abundando en su vida, te vas dando cuenta toda su valía». Ella «también es maestra, porque enseña. Sí, a mí me enseñó, un año, me pidió que no dijera más discapacidad, sino que empleara diversidad funcional, y a partir de ese día, ya siempre lo digo así».
Aludió a que en 2010 nació su hijo Adrián y se instauró este Premio de la Solidaridad. «Las asociaciones hicieron que se visibilizara, en un premio concreto, en un reconocimiento a las personas o instituciones que peleaban, luchaban, trabajaban y se interesaban por las demás organizaciones de Antequera. Y han pasado ya, pues un montón de ediciones. Y la riqueza de Antequera es que el año que viene tendremos otra persona de indudable valía para reconocer que es su aportación a la sociedad».
Emocionó cuando compartió: «Los que sin haber padecido cáncer, hemos vivido con el cáncer, sabemos apreciar cómo cambia la vida y cómo hay que tener una bondad, infinitas como la que tú tienes, para seguir adelante. Eres una persona tan valiosa para la ciudad, que hoy, la plataforma de voluntariado te propuso y tus compañeros de gestión del Servicio Sociales, pues te votaron. Para toda la corporación y para toda la ciudad eres un orgullo, eres un orgullo de madre, eres un orgullo de esposa, eres un orgullo de amiga, eres un orgullo de voluntaria, eres un orgullo de maestra, eres un orgullo de persona en la cual todos deberíamos imitar, todos».
Terminó al exponer que ahora que llega Navidad, «vienen fechas en las que todos nos sentimos mejores personas. No se vive una Navidad permanente en la vida, pero en su casa, hay una Navidad permanente, porque en ella todo es amor, todo es cariño, toda esa entrega con los suyos, con su familia y también a los demás».

La trayectoria de Rosi Morón
Rosi Morón Trillo es una de las voces más activas y reconocidas en la defensa de los derechos y la inclusión de las personas con capacidades diferentes en Antequera. Su implicación surgió de su experiencia personal como madre, que la llevó a trabajar de forma decidida para mejorar la integración, la autonomía y las oportunidades de vida de jóvenes y adultos con diversidad funcional.
Durante su etapa al frente de la Coordinadora de Asociaciones por la Integración en Antequera y Comarca (CASIAC), impulsó programas de sensibilización, formación y apoyo a familias, así como iniciativas pioneras centradas en la transición a la vida adulta, la accesibilidad y la participación social. Su liderazgo dejó una huella profunda en la entidad y en el tejido social de Antequera.
Además de su labor en el ámbito de la inclusión, Rosi ha dado un testimonio de fortaleza y compromiso público al visibilizar su lucha contra el cáncer de mama, convirtiéndose en un referente de concienciación y apoyo emocional para muchas mujeres. En 2021, recibió el Premio Efebo a la Inclusión 2021, puso en valor su dedicación y su capacidad para movilizar a la sociedad antequerana en torno a la igualdad y la solidaridad.
Rosi y su hijo Adrián, Adrián y Rosi, son la cara alegre de las redes sociales, donde nos levantan una sonrisa con su forma de tomarse la vida, dándole importancia a lo que tiene el mero hecho de levantarse y tener al lado alguien que te ama y alguien al que amar. Han vivido juntos este verano en el Hospital. Ella, operada por segunda vez de cáncer de mama, él, de un problema en la columna.

















