La iglesia de La Trinidad acogió el pasado fin de semana la festividad del Señor del Rescate, para lo que se alzó en un altar extraordinario donde se le ofrecieron tres días de culto del 25 al 27 de octubre.
Así, el viernes 25 se expuso el Santísimo ante el que el Grupo Joven de la Cofradía preparó una sentida oración con el nombre de “Jesús Redentor, Camino, Verdad y Vida”.
El sábado 26, el Señor permaneció en veneración, destacando estar en el centro del Altar Mayor como recuerdan las estampas antiguas y está siendo colocado en los últimos cultos extraordinarios de la cofradía que preside Francisco Peláez.
La imagen del Señor de Antequera en su Rescate estuvo bajo dosel, sobre su antigua peana procesional, flanqueado por los cuatro faroles de su actual trono.
Por último, el domingo 27, la misa parroquial de mediodía acogió la misa que fue concelebrada por los trinitarios Vicente Elipe, Isidoro Murciego y Eduardo Martínez. En la homilía profundizaron en las lecturas del día.
La Coral María Inmaculada acompañó musicalmente durante varios pasajes desde el coro alto, dando esa solemnidad que significa el Señor del Rescate en su barrio y en su ciudad.
Durante la misa, juraron su cargo tres nuevos miembros que se incorporan a dicha Junta. En el momento de las ofrendas, se presentaron para su bendición un escapulario para el Señor, donado por el Grupo Joven y una corona de espinas y un juego de gemelos donados por una familia devota muy ligada a la Cofradía. Todas las piezas están realizadas en plata, han sido diseñadas por Ángel Sarmiento y ejecutadas por Raúl Cejas.
Durante la Acción de Gracias, la Cofradía hizo entrega de colaboraciones económicas a la Comunidad de Padres Trinitarios, Cáritas Parroquial y Fundación Prolibertas, así como de unos reconocimientos públicos a personas y entidades fielmente cooperadoras con la Cofradía.
Una celebración que pone de manifiesto lo que el Señor del Rescate supone para la ciudad y sus devotos.
