La iglesia de Santo Domingo acogió la festividad de la Virgen de la Paz entre el domingo 21 y el miércoles 24, con una misa y apertura del templo para su veneración.
Para la ocasión se bajó a la advocación mariana desde su camarín del Altar Mayor a pies del presbiterio. Se dejó una silla simbólica en su peana superior. Para empezar, el domingo 21 misa a las 13 horas. Se llenó el templo.
Misa celebrada por el carmelita Antonio Jiménez. En la homilía se centró en las virtudes de una madre, que siempre acude en auxilio de los hijos. Como hace la Virgen de la Paz, que va en nuestro socorro a darnos tranquilidad. Pidió por la paz en el mundo que tantas malas noticias nos traen por tantos conflictos.
La misa estuvo amenizada al piano por Francisco Jesús Flores Matutes. Se pidió por el eterno descanso de Carmen Bueno y las camareras Purificación Vidaurreta y Dolores Bellido. El miércoles 24, el templo se abrió de de 18 a 22 horas para su veneración y rezo del santo rosario.
