La lluvia apareció en Antequera tras tres días en los que los pronósticos daban riesgo de precipitaciones y sorprendió a la Cofradía del Rescate cuando la Virgen de La Piedad iba entre La Vega y La Taza y el Señor del Rescate por el Barrio de Miraflores, por lo que tuvieron que cambiar su trayecto, girando a la izquierda en Laguna con Cantareros, buscando Lucena y Cruz Blanca en vez de San Luis e Infante don Fernando.
Las primeras gotas empezaron a caer y de ligera llovizna pasó a chaparrón persistente, por lo que la Cofradía decide seguir adelante y si no paraba al llegar a la esquina de Laguna con Cantareros, regresarían a casa. Así lo hicieron y el trono de la Virgen casi improvisa una «vega» entre Laguna y Cantareros, dejando atrás al Señor, que precisó que un hermanaco se subiera al trono para sujetar un candelabro por peligro de doblarse como el pasado año.
A las 22,04 horas, los dos tronos ya estaban dentro del templo trinitario, donde le cantaron saetas a las dos imágenes, entre abrazos de devotos que lloraban porque la lluvia les había impedido terminar su procesión como tenían soñado.
Procesión de estrenos
Tras las visitas matutinas y la misa a mediodía, Desfile de la Armadilla y oración antes de salir, ordenando el hermano mayor Juan Ortigosa, que abrieran las puertas del templo a las 19,34 horas, comenzando a salir todo el cuerpo procesional.
Emotivo paso del Señor entre filas de mujeres con mantilla española y palabras de sentimiento del hermano mayor Guillermo Ramos. Primero salió el Señor que aguardó en una abarrotada Cruz Blanca, a su Madre, la Virgen de La Piedad. Tras salir, a las 20,10 horas suena «Concha» y ambas imágenes se despiden para comenzar la procesión.
Subida por calle Porterías, entrada por Virgen de La Piedad, Barrio Miraflores, Toronjo, Taza y La Vega, donde empezó la lluvia que obligó a cambiar el recorrido y horario final. Prudencia inicial que se convierte en un acelerado paso y esfuerzo de los hermanacos, sobre todo de la Virgen, que ante la complejidad de entrada al templo, decidieron adelantarse con celeridad para no entorpecer la llegada del Señor.
Una año, donde Encarnación Campos Pedraza y Javier Subires Jiménez volvieron a sorprender por la nueva forma de vestir a María, este año con escapulario pintado por el joven artista Ángel Sarmiento y con la saya blanca que llevara en su 50 aniversario.
Y en el Señor, su camarera Carmen Ramos da un nuevo “toque” con la donación de una nueva túnica, de terciopelo marsala, realizada por Rosa María Acedo. Todo, en el último año de Ortigosa al frente de la Cofradía.
Un cortejo que contó con la Asociación Musical San Isidro Labrador, de Churriana, tras la Virgen y la Banda de Cornetas y Tambores de la Hermandad de la Vera Cruz, de Almogía, delante del Señor.
Terminó en apenas dos horas y media, una procesión donde se notó mucha más gente en la salida con una Cruz Blanca impresionante de personas, fe y mezcla de sentimientos entre las mantillas, penitentes, hermanacos y directivos, nuevos aires en la forma de preparar los tronos, pero sobre todo, mucho que agradecer al Moreno de la Cruz Blanca y su Madre de La Piedad por escuchar las peticiones que reciben todo el año.
https://www.youtube.com/watch?v=uWLmYOr2rKM
https://www.youtube.com/watch?v=zLXdbc2W11E
https://www.youtube.com/watch?v=MsyuzeCZpL4
https://www.youtube.com/watch?v=wKtMa1tgt5E
https://www.youtube.com/watch?v=WSoocbH-MLc
https://www.youtube.com/watch?v=jvcSthixCN8
https://www.youtube.com/watch?v=0NH7FqQA6-Q
https://www.youtube.com/watch?v=eR-t3CazSEY