Cañadas ha destacado su sentimiento como Hermano Mayor de la Hermandad del Rocío de Sevilla, emocionándose en varias ocasiones. Igualmente, ha mostrado sus sentimientos, iniciando su intervención con unas «primeras palabras de perdón, perdón por mi osadía y mi atrevimiento en venir a vuestra casa y hablaros de las cosas del corazón».
Así mismo, ha hecho hincapié en la Romería de Pentecostés: «Y en el camino que avanza, como la vida misma, habrán de pasar horas de apreturas y sufrimiento, de esfuerzo y de cansancio, pero también y la mayor parte de ellas, serán de gozo, de entusiasmo y alegría por estar junto a los amigos y familia y por acompañar hasta la aldea, junto al nuestro, al mejor compañero que se puede tener: el Simpecado de Sevilla. Y todo, para llevar con verdad nuestra fe por los caminos, dejando de manifiesto lo que sentimos por María en su advocación del Rocío».
Finalizó ensalzando la hermandad de Antequera: «20 años caminando con Sevilla hasta el Rocío, 20 años de la mano teniendo un mismo destino. Del Torcal a la Giralda, cruzando pueblos vecinos, llegasteis para quedaros porque la Virgen lo quiso». La Hermandad antequerana prepara su camino para Pentecostés, tras haber realizado su Triduo y Pregón. El próximo 26 de mayo, antes de partir a la Aldea, Rosario Vespertino desde San Miguel, de cara a la Romería de Pentecostés del 1 al 5 de junio. Más información, edición impresa sábado 20 de mayo de 2017 (pinche aquí y conozca dónde puede adquirir el ejemplar) o suscríbase y recíbalo en casa o en su ordenador, antes que nadie (suscripción).