Juventud y Tradición se unen en la muestra fotográfica ‘Devoción en Detalles’ de Marta Berrocal. La exposición, que se puede visitar hasta el 20 de abril en la Casa de la Juventud, es una de las alternativas culturales programadas desde el Ayuntamiento de Antequera en esta Cuaresma 2025.
Su autora, estudiante antequerana de Diseño Gráfico, ofrece su primera muestra en solitario en la que pretende “ofrecer una mirada distinta de la Semana Santa de Antequera, enfocada a ese espacio y los detalles que no suelen ser vistos o captados en cámara”.
Detalles de las manos de los Sagrados Titulares, de tronos, de devotos o momentos premios a la Estación de Penitencia quedan reflejados en una selección de obras captadas tanto a lo largo de algunos días de la Semana Santa pasada como con posterioridad en los templos. “Las cofradías me han abierto las puertas de sus casas y me han enseñado todo lo que tenían en lo que ha sido además un aprendizaje muy interesante”, señala la propia Marta Berrocal; quien asegura que “me he quedado fascinada al hacer la exposición, porque no era consciente de todo el patrimonio que tiene nuestra ciudad”.
Ha querido aportar una visión diferente “fijándonos en aspectos que son complicados captar en cámara, y que le da un valor añadido a nuestra Semana Santa”. Para el tratamiento de la imagen ha optado por el blanco y negro, “que nos hace retener las formas para transmitir mejor el mensaje. Es, para mí, la forma más pura de la fotografía”.
Tras haber realizado un trabajo previo de clase sobre la salida del Patrón, se le han abierto las puertas de la fotografía cofrade. “Yo siempre me he considerado una persona cristiana, devota y cofrade, pero sí que es verdad que era muy ignorante en muchos aspectos. Nunca he estado metida en una cofradía, aunque siempre he sido muy de la de Arriba, con mucha devoción hacia mi Socorrilla, que me ha gustado de siempre”, nos confiesa.
La elección de la foto que ilustra el cartel de ‘Devoción en Detalles’, con una trasera del manto de la Virgen del Socorro en su imponente trono procesional, no es por tanto algo casual. “Ha sido algo subjetivo por mi parte”, reconoce. “Estoy rodeada de gente a la que le apasiona la Semana Santa y al fin y al cabo eso se te contagia un poco”, añade sobre su acercamiento a esta tradición religiosa que cada vez está más arraigada entre los jóvenes antequeranos: “La mayoría de mis amigos, por no decir todos, son cofrades”.
Una experiencia muy constructiva para la autora
Muchos de estos jóvenes ya han tenido la oportunidad de presenciar la exposición en la Casa de la Juventud, y “me ha sorprendido muchísimo el apoyo que me están mostrando”. “En general todo ha sido muy positivo, pero también animo a la gente a que me saque críticas, porque las críticas son constructivas y yo tengo muchísimo que aprender o mejorar”, añade.
Después de todo el proceso de selección de las fotografías, de tratar su imagen y preparar la exposición, le resulta difícil decantarse por una instantánea. “Es que me gustan todas, lo digo en serio, e incluso tengo un montón de fotos en la recámara que me habría encantado poder compartir pero ya no era posible por problemas de espacio”. Con todo, promete ir subiéndolas poco a poco a sus redes sociales, al tiempo que las pone a disposición de todas las cofradías “ya que me encantaría que tuvieran ese recuerdo”.
A partir de ahora, prefiere “no ponerme límites y seguir investigando”. No cierra las puertas al campo cofrade, ya “que me gustaría hacer fotos procesionando, buscando esos detalles que ahora he captado en los templos en la calle”. No obstante, también tiene otras inquietudes “como puede ser la fotografía publicitaria que se acerca mucho a mi futuro profesional, así como de eventos u otros campos hasta encontrar en el que me encuentre más cómoda”.