La iglesia parroquial de San Pedro acogió del viernes 18 al domingo 20 el Triduo al Cristo de la Misericordia, para lo que se trasladó la imagen desde su capilla de Ánimas hasta el presbiterio.
Así, el viernes 18, a las 20 horas, besapié al Cristo para a las 21 horas, traslado al Altar Mayor. Hubo oración cantada por parte del grupo juvenil Tibi Credo, a cuyo término Javier Royán Alba rezó: “Misericordia, qué bonito nombre tienes y qué tarea tan compleja la que tienes, pero por eso fuiste el elegido, por tu enorme capacidad para ofrecer cada día ayuda y compasión por los que sufren y sufrimos”, compartió el cofrade.
A su término, el músico Jesús Sarmiento López obsequió la composición “Hijo Prodigo”. Francisco Curiel decoró floralmente el entorno del Señor con brassica, rosa, clavel, eryngium, esparraguera plumosa, cardo, orquídea y diferentes verdes.
El sábado estuvo todo el día en veneración para, a las 20,30 horas, celebrarse una Eucaristía presidida por el párroco Francisco de Paula Baquero a la que asistió el alcalde Manuel Barón.
En ella tomaron posesión los auxiliares y camareras de la Junta de Gobierno, así como se rindió homenaje al hermanaco Joaquín Herrera García por sus 25 años bajo las andas.
Antes, en Cabezas de San Juan, participación en el encuentro andaluz de hermandades de la Misericordia, a la que acudió el hermano mayor Juan Jesús González con varios directivos.
Y se finalizó el domingo 20, primero a las 11,30 horas en la Residencia de San Juan de Dios con una misa con especial alusión a las personas enfermas y luego ante el Señor en San Pedro.
