Hace 75 años, Antonio de Luna García pronunciaba el primer Pregón de la Semana Santa de Antequera en 1950. En el año 2000, el recordado Ángel Guerrero Fernández promovió organizar un vía crucis de pregoneros. Así, este sábado 15 de marzo, acogió la cuarta edición, que reunió a veinte de los treinta y uno vivos y donde se conmemoró la efemérides en este año jubilar.
Antes se descubrió y bendijo una cruz que lleva los nombres de todos los pregoneros que ha tenido la ciudad desde 1950 hasta este 2025, así como las referencias a los vía crucis y pregón magno desarrollados. Ha sido realizada por Cristina González de Artekira, en madera dorada y con imitación a carey. Mientras que Pepe Cantos Platero ha realizado las 66 placas que están incrustadas en la parte trasera de la cruz.
El vía crucis fue conducido por el párroco Francisco Aurioles, quien bendijo la cruz, oró ante cada estación, basándose en el Vía Crucis en el Coliseo en el Viernes Santo 2005, promovido por Joseph Ratzinger, quien fuera el Papa Benedicto XVI.
El director de El Sol de Antequera, antes del inicio de la oración, anunció que se había preparado una cruz por este aniversario, pidiendo que la descubrieran el alcalde Manuel Barón, la presidenta de la Agrupación Trinidad Calvo, María Teresa Clavijo (esposa del que fuera promotor de estos encuentros) y Francisco González, padre de Cristina González de Artekira.
El cuarto vía crucis de pregoneros
Y empezó el vía crucis por parte del matrimonio de pregoneros formado por Carolina Guerra Rodríguez (1996) y Rafael Artacho López (1985). Supieron a la perfección exponer por qué se habían reunido y recordaron el inicio de los Pregones y los cánticos poéticos a la Semana Santa desde las páginas del periódico. “Siguiendo este camino, nuestros pasos mantienen viva una Tradición que este Sol de Antequera llevaba en los genes, y que hace casi un siglo, don José Muñoz Burgos, Director que fue de este periódico durante varias décadas, llamó en unos versos inolvidables “La Fe Antequerana”.
La primera estación fue pronunciada por Elena María Melero Muñoz (2024) y Antonio Jesús Palomo Domínguez (2023). Ambos expusieron su juventud y cantaron las imágenes de Antequera. “¿Cuántas veces nos convertimos en jueces condenatorios de los demás?. Perdónanos, Señor”.
La segunda por José Escalante Jiménez (2011) y Manuel Jesús Barón Ríos (2005) donde exaltaron a los titulares del Lunes Santo. “Cada espina de su corona la endulza el amor sincero. Él sabe que están los ojos de la Vera Cruz intercediendo”.
La tercera por Carmen María González Pérez (2010) que tuvo que compartir lo escrito también por Manuel Díaz Ruiz (2015), quien no pudo llegar por un corte en la carretera esa mañana. “Y es, en esa mirada infantil, llena de recuerdos donde me encuentro. Porque con la cruz llegó la Paz. Devoción inquebrantable, Fe que camina por las calles”.
El decano de los pregoneros presentes, Joaquín García Carrasco (1984) hizo la cuarta estación. “La compasión anima la mejor manera de mirar. Por eso, las madres son así. Vivir es recibir cuidados maternales o quedar en ninguna parte”.
La quinta, por Manuel García de la Vega (2022). Derrochó sentimiento ante el momento en el que el Cirineo ayuda a llevar la cruz al Nazareno, su Nazareno del Socorro. La sexta por medio de María del Carmen Villalón Artacho (2020). “Le sobrecoge la hondura firme y tierna de los ojos de Jesús Nazareno de la Sangre… con la Esperanza de encontrar a los suyos entre la multitud”.
En el ecuador, la séptima a cargo de Gerardo García Sobrino (2009) quien estaba previsto que la hiciera junto a Antonio Alcaide García (1991), quien por motivos de salud no pudo desplazarse finalmente. “Señor, por tu segunda caída, líbrame de caer a la mitad de mi Vía Crucis”.
La octava estación por parte de Eugenia María Acedo Tapia (2019). “La Cruz de Cristo es callar, perdonar y rezar unos por otros. Como las mujeres”. La novena por el que será pregonero este año, Pablo Javier Guerrero Clavijo. “Y es que te miro te miro y tiemblo, mi Cristo Caído. Porque tus Dolores… siempre serán nuestro Consuelo”.
La décima compartida por Francisco Morente Tomás (2013) y Francisco Javier Pérez Cervantes (2006). “Todos nuestros esfuerzos, aun los más insignificantes, adquieren un alcance eterno, porque van unidos al sacrificio de Jesús en la Cruz”. La undécima a cargo de Juan José Sánchez Ramos (2014). “Te adoramos y te bendecimos, te rezamos ante nuestras imágenes antequeranas del Cristo Verde, Cristo de la Buena Muerte, Cristo de la Misericordia y Señor de la Salud y de las Aguas”.
La duodécima por Ana Lara Torres (2007). “¡Cristo muere! ¡La Cruz sostiene su cuerpo escarnecido! ¡Más no temáis por Él, que está dormido!”. La decimotercera por Antonio José Guerrero Clavijo (2018) quien unió la muerte de Jesús con la de nosotros, con el dolor de una madre al tener en su brazos a un hijo.
La última a cargo de Francisco José González Díaz (1987). “Y así, confiando en tu palabra, desea que el tránsito sea lo más leve posible para, pronto, reencontrarse contigo, resucitado, al tercer día, triunfante en el cielo y rodeado de nuestros seres queridos que gozan de tu eterna presencia”.
Y tras la oración final del sacerdote Francisco Aurioles, hubo acción de gracias por parte de Bartolomé Ruiz González (2008). “Se ha cumplido lo anunciado por los profetas hemos pasado de la tiniebla a la luz del pecado a la gracia de la falsedad a la gran Verdad de la tierra al mismo cielo de los interrogantes a tu vida como respuesta: ¡Has Resucitado, Señor!”.
Y terminó el solemne acto que recorrió la Semana Santa a través de las voces de sus pregoneros, fusionando cada estación con una reflexión que evocó los años que exaltaron. Y concluyeron con una acción de gracias que abre las puertas del triunfo con la Resurrección.
