Atenea Ceremonias rendía homenaje en la Finca Eslava a su modista Carmen Barroso Perdiguero, que comenzaba su jubilación tras una larga trayectoria. La firma inició su andadura en diciembre de 2001, y en febrero de 2002 ya contaba con Carmen. Esta relación laboral ha durado 19 años y poco a poco ha ido transformándose en una bonita amistad.
Virginia Paradas Melero, gerente de Atenea Ceremonias, comparte cómo comenzó esta relación: “Ella ha tenido una trayectoria de modista desde muy muy joven, y cuando abrimos la tienda, se unió a nuestro equipo y hasta el día de su jubilación ha estado con nosotros, ha sido una modista extraordinaria”.
Tanto Virginia Paradas como su hermana Chelo, consideran la labor de Carmen Barroso importantísima en Atenea Ceremonias, y consideran que además de una relación laboral, les une una gran amistad. “Han sido muchos años en los que hemos sido compañeras, hemos sido amigas, hemos reído, hemos sufrido, ha habido de todo, pero ha sido todo muy bonito. Ha estado durante todo el tiempo con nosotras, apoyándonos, encantadora, se ha volcado con las clientas… ha sido extraordinaria”. Carmen también siente igual, y afirma: “Hemos sido compañeras, pero sobre todo amigas. Después de 19 años trabajando, hay una amistad muy grande”.
“Le hemos querido hacer un homenaje, que ha sido más pequeñito de lo que nos hubiera gustado por las circunstancias que estamos viviendo, pero que ha estado cargado de muchísimo cariño”, señala Virginia Paradas, quien a su vez da la bienvenida a su nueva modista: “Se llama Setefilla Muñoz Plá y que también es encantadora. Ella es diseñadora y patronista, ya había trabajado con nosotras antes por lo que conoce nuestra dinámica”.
