La Chirigota Antequerana es todo un emblema del Carnaval de la ciudad. En sus más de dos décadas de vida ha sacado tipos que aún hoy son recordados con enorme cariño. Muchos de ellos los ha lucido Miguel Ángel Sánchez, uno de sus integrantes desde 2007 y actualmente el encargado de la dirección interna de la agrupación como presidente de su asociación.
“Empecé a ensayar en 2007, pero mi primer Carnaval fue el de 2008”, recuerda con cariño sus inicios. “La afición me llegó a través de ver los Carnavales de Cádiz por la televisión, era una fiesta que me gustaba, pero no tenía ningún antecedente”, indica.
Sí que es cierto que antes de entrar en la agrupación que había podido ver cómo se vivía la fiesta en otros momentos en nuestra ciudad. “En los años 80 estuve trabajando en la Excursionista, y allí sí que había muy buenas fiestas de Carnaval, con una chirigota masculina y otra femenina. También mi suegra era una persona a la que le gustaba muchísimo y ha participado en todas las agrupaciones femeninas, como la que después hicieron en Matagrande”, recuerda.
“Yo conocía a casi todos los componentes de lo que entonces era la Chiriparsa, y muchos de ellos eran amigos como Juan Pavón, Perry, Pepe Cantos, Pepe Carbonero o Pino… pero hasta entonces siempre lo había visto desde la lejanía”, rememora cómo fue su primer acercamiento al grupo.
Ese primer año fueron ‘Con V de Bandoleros’, “y éramos unos bandoleros antequeranos que nos escondíamos por la Sierra del Torcal y éramos muy malotes”. Además, casi desde el principio empezó a encargarse “de todas las relaciones con ayuntamientos, empresas, burocracias,, papeleo, administración…”.
Son muchos los años que le vienen a la memoria, como un 2010 especialmente duro “porque se produjo un cambio generacional importante”. “Se marcharon ocho componentes a la vez porque habían completado un ciclo, gente tan fuerte como eran Santi Mejías, Quino Vida, Juan Pinto o Antonio Pascual”, rememora con la satisfacción de que el trabajo de todos los que siguieron hizo posible la continuidad.
Los años en los que salieron de legionarios, de radares, el de padres primerizos, o el año pasado como La Última Cena, son algunos de los que les vienen a la memoria a Miguel Ángel Sánchez, quien reconoce que “los últimos años son siempre los que más se recuerdan, pero echando la vista atrás ha habido tipos muy buenos”.
Y así, carnaval tras carnaval, hemos llegado al de este 2024 que el pasado fin de semana vivía sus días fuertes. “Estamos muy contentos, actualmente tenemos una relación muy fluida con el Ayuntamiento, y se han tenido en cuenta algunas de las propuestas que hemos realizado; y se ha solventado los inconvenientes que suponía la lluvia del mejor modo que se ha podido”.
El gran pero lo encuentra en el hecho de haber tenido que hacer las actuaciones en una carpa: “Me da pena, porque Antequera no merece tener un teatro cuatro años cerrado. Cierto es que ha habido una pandemia de por medio, pero unas obras no pueden dilatarse tanto”, manifiesta al recordar que “lo último que se iba a hacer era el Carnaval solidario que teníamos para el 20 de marzo de 2020, no se pudo realizar, y desde entonces nada…”.
“Salvo eso, la gestión del Carnaval me parece correcta; aunque me falta gente en la calle con dos coloretes pintados. Pero eso es algo que no podemos hacer nosotros”, explica como punto a mejorar y que se contrapone al auge de las chirigotas en Antequera. Sobre si ejercen de ‘padres’ de las demás, considera que “algo habremos trabajado bien en el fomento de la fiesta, y para nosotros es un orgullo que cada vez haya más agrupaciones, que no sé si nos ven como referentes o como puretillas”, bromea.
La necesidad de encontrar un lugar para el Carnaval
“El Carnaval está en la calle, lo hace la gente, y nosotros por mucho que hagamos chirigotas, no conseguimos nada si la gente no sale”, explica señalando que “es necesario encontrar el espacio urbano donde se pueda desarrollar la fiesta”.
En ese sentido, considera que “el Coso Viejo puede ser un buen lugar para los disfraces, pero para el tema de adultos no. Para eso habría que cortar la Calzaba, que es donde están los pubs”. Tras probar muchos puntos de la ciudad donde no ha funcionado el Carnaval, “el Coso Viejo por cercanía puede ser el menos malo, pero después llega Semana Santa y se cortan todas las calles sin problema”, incide para reclamar la utilización de la Calzada: “No pasa nada porque un día de Carnaval se corte una calle”.
Un punto a favor de la evolución del Carnaval lo encuentra Miguel Ángel Sánchez “en el buen rollazo que tenemos entre todas las agrupaciones”, que permite aportar ideas al Ayuntamiento como la Ruta de Coplas que parece haberse consolidado este año. Este buen ambiente les aparta de querer hacer un concurso, “ya que no queremos una rivalidad entre nosotros, y por nuestra parte preferimos seguir con el encuentro, aunque esperemos que de una vez por todas el año que viene pueda ser en el Teatro Torcal”.
Su experiencia de este 2024 como cepillo de dientes en ‘Todo por la pasta’ la define como “una pasada, sobre todo por el partido que se le ha sacado a algo tan sencillo”.
Aunque de forma oficial el Carnaval 2024 ya ha terminado, aún quedan oportunidades para disfrutar de su repertorio en diferentes eventos a desarrollar durante este fin de semana. Sánchez anima a todos los antequeranos a corear sus coplillas y, de cara a años venideros, a participar con sus disfraces.
A modo irónico, propone “organizar una carrera, como la San Silvestre, a ver si la gente así se disfraza”. A modo serio, nos dice “que la gente se disfrace cuando le apetezca, pero por lo menos que se pongan dos coloretes y solo con eso ya se hace Carnaval”. “Las costumbres anglosajonas nos están invadiendo”, se lamenta.
A título personal, se encuentra con ganas y fuerzas para seguir dando guerra con su chirigota: “Soy consciente de que el chirigotero tiene una vida, que hay que dar paso a gente nueva, pero reunir el grupo humano que hemos conseguido será muy difícil de repetir; vamos todos a una, aunque tenga mucho trabajo, nuestras familias han hecho una piña, y por eso mientras el ciclo dure no voy a ser yo el que diga que me voy”.
Otro tema que preocupa a la Chirigota Antequerana, y particularmente a Miguel Ángel Sánchez, es “retomar el Carnaval Solidario, que íbamos por la cuarta edición, pero no disponemos de un lugar donde hacerlo”. Recuerda que “nos trajimos durante cuatro años a agrupaciones punteras de Cádiz y logramos recaudar un dinerito muy chulo”. Así “estamos esperando que las obras del teatro se terminen para poder recuperarlo”.
Como despedida, nos transmite su ilusión “porque el Carnaval se ponga grande”, e invita a las asociaciones de vecinos y a los anejos a que cuenten con ellos para próximos años en las actividades que organicen. También nos recuerda que “la chirigota no está solo para salir en Carnaval, también hacemos alguna formación en colegios, tenemos jornadas de convivencia carnavaleras durante el año; así como realizamos viajes culturales a Cádiz, además de hacernos nuestro propio tipo”.