¿Seis Orejas en Antequera una corrida en estos tiempos, como está la Plaza? ¡Seis orejas, los tres diestros a hombros y el mayoral, también. Y la gente aplaudiendo y felicitando al Empresario Romántico, Paco Dorado.
Y es que por Antequera lo tenemos claro: toros con su edad y sus defensas naturales, que tengan la presentación adecuada y que no sean elefantes, ni esos toros que vemos en otras plazas, que no pueden con su esqueleto, que se caen, y que con toros de tragedia más que toros de fiesta. Para una ciudad, en la que se ven cinco corridas al año, preferimos lo que desde 1998, nos trae Paco Dorado, el «Empresario Romántico», que tiene en su laboratorio la alquimia que le permite que rarísima sea la corrida en que no se abrió la puerta grande de la Plaza. Toros en su tipo, propios de una plaza preciosa, pero de tercera, y toreros que vienen sabiendo que el público les acoge con ganas de vivir, con ellos, una fiesta. Y en la presidencia, un presidente que no regala orejas, ni se viene abajo por lo que algunos le dicen reclamando trofeos para sus ídolos. Lo demás viene rodado, como esta tarde en la que Curro Díaz, cortó tres orejas; Rivera Ordóñez «Paquirri» y David Fandila «El Fandi», dos cada uno, salieron a hombros en la segunda de abono de la Real Feria de Agosto de Antequera, acompañados por el mayoral de la ganadería de Julio Puerta..
Se lidiaron seis toros de Julio de la Puerta, noblotes, con las fuerzas justas mitad y mitad, pero nobles y colaboradores con los toreros. Casi tres cuartos de plaza.
Rivera Ordóñez «Paquirri», que llevaba varios años sin venir a uan Feria en la que siempre triunfó, se ha mostrado un torero más cuajado, más reposado, que a sus ganas de siempre suma sentido, regusto en muchos pases y con la espada está hecho un cañón. Encima, regala al público banderillas y se comprende que cortara una oreja en cada toro y se le pidieran más trofeos a un presidente, José Luis Viera, que lleva años queriendo dar seriedad, y manteniéndola, al coso antequerano. ·En su primer, breve con el capote, tras un piuyazo, pones tres pares, el último «al violín», para lograr una preciosa faena de muleta, basada en la mano derecha, que correspondía al pitón por el que iba mejor el toro. Circulares y desplantes preceden a una estocada entera, que hace doblar al todo. Una oreja y petición fortísima de la segunda.
En su segundo se luce por verónicas y chicuelinas. Pone otros tres pares, el último «al violín», y con la muleta torea hondo, despacio, antes de matar de una gran estocada. Una oreja.
Curro Díaz, fue el triunfador de la tarde. Estuvo artista hasta más no poder, sabe darle al toro la distancia justa y con la muleta logran tandas lentísimas, con la tela desmayada, que el público vitoreó. Breve con el capote en sus dos toros, como cuidando al toro para el último tercio, para luego con la muleta, lograr para el reloj del buen toreo, con la franela desmayada, y prodigiosa lentitud en faena primorosa, que remate con estocada perfecta que le vale dos orejas. En su segundo. Faena por el mismo estilo, aunque el toro le permitió, por no sobrarle las fuerzas, una faena tan larga y brillante, aunque eso sí, con destellos de toreo artista, prodigio de lentitud y buen gustp. Cobra una estocada y corta otra oreja.
David Fandila «El Fandi» se luce por verónicas y lleva al toro al caballo por chicuelinas, para hacer un quite por delantales rematado con una serpentina. Tres buenos par4es de banderillas, el último «al violín» y con la muleta faena voluntariosa estropeada por que el toro se rajó. Estocada hasta los gavilanes, y una oreja. En su segundo, «picado» porque sus compañeros se habían asegurado la puerta grande, recibe al toro de rodillas, para enjaretarle una gran tanda de verónicas. Tres pares de banderillas, muy arriesgados, que el público le agradece con sus aplausos. Con la muleta, derrochó ganas y logró excelentes tandas estimables, que remató de pinchazo y gran estocada cortando una oreja.
Al final, gran ovación para despedir a los espadas y al empresario Paco Dorado, saliendo la terna a hombros.