Francis Morales es el capitán del Iberoquinoa Antequera. El jugador local, que se ha perdido buena parte de la temporada por una lesión en su nariz, pero está de vuelta para la disputa de la Copa del Rey: “Estoy listo, trabajando duro para ser uno más del grupo y que cuando el míster lo crea conveniente, pueda aportar al equipo”.
“Es un acontecimiento muy importante para la ciudad, en la que se está apoyando mucho el deporte”, señala advirtiendo que “lo que esté pasando en la Liga no tiene nada que ver, la Copa del Rey es otra historia, y ha llegado la hora de disfrutar de un gran fin de semana de balonmano”.
Toda Antequera se va a contagiar entre el 25 y el 27 de marzo de la pasión por el balonmano, “esperando que todo el mundo se vuelque y llenemos el pabellón el viernes en el partido de cuartos de final para que disfrutemos tanto los jugadores como la afición, y que Antequera tenga la repercusión que se merece”.
En su caso, se quiere resarcir de este año tan duro en lo personal. “La temporada la afrontaba con una ilusión enorme, pero son gajes de oficio, me partieron la nariz y estoy a la espera de poder estar al cien por cien y ayudar a mis compañeros a dar la sorpresa”.
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Antequera, siempre un club de cantera
Francis Morales es el mejor ejemplo de lo que la cantera significa para este club: “Eso es algo que nunca se puede perder, tenemos que seguir formando jugadores y algunos tendrán la suerte de llegar al primer equipo”.