Estamos en puertas de una nueva Navidad. Tras las dos anteriores con restricciones, volverá sin mascarillas ni el temor de la pandemia. Con ella los tópicos de siempre, a los que estamos llamados a cambiarlos o, al menos, mejorarlos.
Para empezar. ¿Qué significa Navidad? Para los cristianos es una nueva ocasión de empezar de cero con el nacimiento del Niño Dios. Como la vida, empieza con alegría, amor, esperanza y desear lo mejor para lo que está por venir.
Una ocasión para reflexionar en nuestro interior. Todo empieza en un pesebre en un humilde portal, donde se demuestra que lo básico, lo imprescindible es la vida, la familia, el amor, la esperanza por todo lo que debemos de caminar.
Luego estarán los complementos, lo material, lo que le rodea. Pero caemos en el error de dejarnos llevar por lo superfluo y dejar sin sentido lo que se celebra en Noche Buena.
Por otro lado, el aspecto comercial. Con el paso de los siglos, la Navidad se va dirigiendo a una globalización del consumo. No vamos hoy a cambiar esa forma de entender la vida; pero sí le podemos dar un giro.
¿A qué no cambiaría el nacimiento de un hijo, el beso de amor de la persona que tiene al lado, ese plato de comida de la abuela o ese momento con sus padres? Pues en el Comercio, pasa algo parecido.
En pleno año 2022, las compras por Internet han copado el espacio no sólo del comercio tradicional, sino de las grandes superficies.
Es por lo que debemos de concienciarnos. Cada casa tiene un autónomo, un comerciante, alguien que vive por y para el cliente. ¿Tanto nos cuesta pensar en ellos antes de decidir dónde comprar? ¿Tanta variación hay?
No se va a prohibir, pero habría que compensar la balanza. Puede que haya productos que no encontremos aquí, pero para todos los demás: Antequera.
La atención personalizada, el buscarnos lo mejor, el arreglar esa prenda, el instalarnos el electrodoméstico, el buscarnos ese libro, asesorarnos en el viaje… Todo esto sólo lo ofrece el comercio cercano, el de Antequera.
Y si hay que buscar cómo competir en precios, ahí están alternativas como los bono comercio que se iniciaron consiguiendo que con esa rebaja, apostar por lo nuestro. Ojalá se vuelva a respirar ese ambiente en nuestra ciudad.
Y al igual que hacen las capitales como las ciudades medias, el ocio que puede ofrecer Antequera. Hoy se viaja y se consulta todo, por lo que hay que buscar algo llamativo, impresionante, para todos los gustos.
Hoy todo paso se compara al instante con el móvil, por lo que acertar con una exposición o diversión puede ser fundamental para ese gancho de la Comarca. Nos viene a la mente los aciertos de la fiesta de Halloween de Proyecto Humano o el Bienmesabe de Piobiem. Si encontramos un atractivo que nos haga sentir diferentes, el éxito está asegurado.
Ante el turismo también por Navidad, los niños son el gran reclamo. ¡Lo que disfrutan cuando vienen exposiciones de Playmobil, atracciones mecánicas en el Paseo o la cabalgata de los Reyes Magos!
Por eso de todos depende que el “Niño” que nace dentro de cada hogar, sea feliz, si le ayudamos a crecer. Piense en cooperar con el vecino, el necesitado, pero también con el comerciante, el hostelero y las ofertas de ocio que se propongan. ¿Te apuntas?
