Las personas mayores son las que más están expectantes de qué pasará con el COVID-19.
Hasta que no haya vacuna y tratamiento, creemos que serán muchos los que se queden en casa. El 6 de julio abrió el Centro de la Calzada, al que a penas acuden 5 de los 200 que iban. ¿No habría que ayudar a los autónomos que tienen concesión en ella como el bar y la peluquería?