La transformación de la Casa de Los Colarte, para acoger un museo de pintura contemporánea, ha transformado su interior, cambiando el aire del siglo XVIII por un conjunto de salas con paredes blancas, lo que ha dejado sin uso, a las obras artísticas antiquísimas y su entorno.
El Ayuntamiento ha pedido a Diputación, que todo su interior se quede en Antequera, entre cuyo inventario destaca el Crucifijo de El Greco que se prevé trasladar al Museo de la Ciudad. En cuanto al mobiliario, ha sido pedido para la sede de la Real Academia de Antequera. El propio presidente Elías Bendodo así lo confirmó este lunes en su visita al MAD (Museo de Arte de la Diputación): «Todo es suyo, el alcalde dispondrá dónde ubicarlo o cederlo». Además se encuentra el crucifijo de El Greco, que Bendodo confirma «se le va a ceder para que se exponga en el Museo de la Ciudad».
Ahora, el Oratorio, Niños Jesús, cuadros, lámparas, faroles, mesas y sillas que conservaba como un palacio señorial, han sido trasladados y se quedarán en Antequera: «El mobiliario está guardado en instalaciones municipales y posteriormente se irá proyectando su ubicación que revalorizará varios edificios históricos», apunta el Alcalde.
El Ayuntamiento de Antequera pidió al organismo provincial que el material no salga de Antequera, con el estudio que las piezas museísticas se depositen en el Museo de la Ciudad (la obra atribuida a El Greco le dará un plus más al Palacio de Nájera) y parte del mobiliario se destine a la futura Sede de la Real Academia de Nobles Artes en la antigua Casa de los Laude, como han pedido ya desde la directiva, así como otras dependencias municipales.
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