Si hay una obra que Antequera agradece y necesita es la de la Estación de la Alta Velocidad, al lado de la actual. Nadie la discute y se soportan las molestias lógicas que una obra así conlleva.
Pero hace poco se cortó el tráfico en la forma que demuestra la fotografía: los automóviles pueden circular, con precauciones, pero circulan; lo malo es para los peatones, para los miles de trabajadores y usuarios de empresas situadas al comienzo de la carretera de Córdoba, como las viviendas que hay por allí, ADIPA, Dcoop-Hojiblanca y la Cooperativa “Los Remedios”, el complejo hotelero-deportivo Finca Eslava, la Virlecha…
Ni trabajadores, ni usuarios pueden ir andando, o se la juegan metiéndose por donde los coches quedando totalmente al descubierto. ¿Vamos a arreglarlo colocando una barrera que les proteja y les permita ir andando a esos sitios? ¡Venga! ¡Vamos a llevarnos bien y a hacer el avío todos!