Las tradiciones se mantienen, se conservan y se mejoran. El pasado viernes 1 de marzo no fue sólo “llegar y besar el santo”, sino que los devotos pudieron además, dar su sangre para quien la necesita.
La Cofradía del Rescate sigue estrechando su unión con los trinitarios y con la base de su fe en el Rescate, que sigue acudiendo a nuestra ayuda con sus manos atados.