Las obras PROFEA que comenzaron en septiembre de 2015 en las calles de Antequera intentan eliminar las barreras arquitectónicas del acerado y el asfalto.
Así, unas de las calles que necesitaba estas mejoras es la Cuesta del Viento, ya que por culpa de la lluvia, las aceras eran resbaladizas y provocaban tropiezos. Por ello, desde hace unos meses se está instalando un nuevo pavimento de granito antideslizante en las aceras y así eliminar uno de los quebraderos de cabeza de los vecinos.