En una de sus visitas a los colegios electorales, le paró una muchacha para enseñarle que se había hecho unos calcetines con el nombre y cara del alcalde Manuel Barón.
Era un ejemplo más de lo que el alcalde está suponiendo para sus votantes. Se está creando una devoción y admiración hacia su figura que puede explicar lo de los 14 concejales.