Desgraciadamente está visto que ni campañas, ni bandos ni vivir en el centro histórico.
Tras apreciar que los dueños no respetan las indicaciones, ¿habrá que empezar a tener una patrulla permanente o utilizar las cámaras del Coso Viejo para sancionar a todo el que deje los excrementos de los perros en calles y plazas? Si no es con el dinero… parece que no aprenderán.