El Maulí vivió una fiesta del fútbol donde no hubo problemas entre las dos aficiones, ni peleas en el campo ni acciones peligrosas. Sólo hubo fútbol donde la lógica se impuso al deseo. El Málaga ganó 0 a 2 al Antequera, que no perdía desde la segunda jornada ante el Real Madrid-Castilla.
Tras una semana de alardes al juego y los resultados del equipo de Javi Medina y dudas al de Pellicer, llegó el partido y habló el balón. El Antequera apostó por su juego y sólo introdujo el cambio de César Sousa en el once titular para sumar efectivos en el centro del campo. El Málaga, por su parte, supo presionar al equipo local, aislar a Luismi Redondo y aprovechar sus oportunidades.
