La subida del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) se ha debido, según el Ayuntamiento de Antequera, a «dos factores principales», las modificaciones en el valor catastral de las viviendas y la orden estatal de aplicar un coeficiente mayor del establecido por el Consistorio, «debido a la situación de crisis en la que toda España se encuentra».
El responsable de Hacienda ha explicado en la mañana de este jueves 3 de septiembre, que el cálculo del IBI depende, por un lado, del valor catastral de cada vivienda, es decir, el valor administrativo fijado por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas para cada inmueble y que resulta de la aplicación de los criterios de valoración recogidos en la Ponencia de valores del municipio correspondiente (localización del inmueble, las circunstancias urbanísticas que afecten al suelo, entre otras).
El segundo factor es, como ha indicado Rosas, el coeficiente que se le aplica a este valor catastral y que el Ayuntamiento tiene fijado en 0,775, aunque se ha estado aplicando un 0,808 por ciento. El motivo reside, según Rosas, en las «órdenes estatales» recibidas por el Ayuntamiento a causa de la crisis económica en España. Otra causa que el concejal de Hacienda considera que ha hecho notar a los antequeranos una considerable subida en su recibo del IBI, con respecto al año anterior, es que en 2014 existía una subvención por parte de la Diputación Provincial que este año no ha habido. Los vecinos cuyo valor catastral de su vivienda no superaba los 100.000 euros, junto a otros requisitos, pagaron entre 40 y 50 euros menos de IBI.
El responsable de Hacienda ha aclarado que cada año se produce una subida de entre el 5 y el 6 por ciento del valor catastral de los inmuebles, «subida que es la normal y que se debe a una regularización constante del nivel catastral de la vivienda». Por otra parte, ha dado a conocer que en la ciudad ha habido hasta 31.000 contribuyentes que han realizado modificaciones en sus viviendas sin haberlas declarado, es decir, construir una piscinas, añadir una planta al inmueble, un cobertizo, entre otras cosas. Según Rosas, las viviendas no modificadas no han debido experimentar una subida mayor del 5 o del 6 por ciento; sin embargo, a los contribuyentes que sí han modificado sus inmuebles, «se les aplicará desde el 2003 la diferencia entre el IBI que pagaron y el que le correspondía. Además, deberán pagar 60 euros en concepto de los trámites administrativos».
