Ricardo Millán Gómez deja de ser alcalde de Antequera, oficialmente, este sábado 11 de junio, tras la toma de posesión de la nueva Corporación Municipal. Manolo Barón se convertirá así en el primer alcalde por el Partido Popular tras 28 años de dominio ininterrumpido de los socialistas.
Millán deja la Alcaldía tras dos mandatos que han comprendido un período de ocho años y un total de 2.919 días en el cargo, al que accedió en el año 2003 sustituyendo a Jesús Romero. Un período, el suyo, de contrastes entre los primeros seis años de bonanza económica –en el que, en sus propias palabras, «podíamos confeccionar un presupuesto con garantías de cumplimiento»– y dos últimos «horrorosos económicamente y a nivel también de la situación desesperada de muchos antequeranos y antequeranas que han perdido todo tipo de aportación», marcados claramente por la crisis económica global que se ha dejado notar especialmente en nuestro país.
Ocho años que a Millán le han resultado «cortísimos por lo intensos que han sido, porque han sido muchísimas actividades, muchas tareas, mucha dedicación al trabajo y a la labor del Ayuntamiento», aunque no le ha cogido de sorpresa, puesto que en el mes de enero anunciaba que no se presentaría a la reelección, decisión que realmente nos confirma tener tomada desde abril de 2010.
Se va por tanto un Alcalde que comenzó siendo considerado «malagueño» –es natural de nuestra capital– pero que, al final de su mandato, nadie podrá dudar de su «antequeranismo», puesto que, como él mismo afirma, «uno es de la ciudad en la que uno se hace». Deja, como herencia, el nuevo PGOU aprobado en 2010, el Centro Cultural Santa Clara, la adquisición del Teatro Torcal, el Centro de Tecnificación de Atletismo o el nuevo Museo de la Ciudad, además de inolvidables hechos como las Copas del Rey del Balonmano Antequera o la celebración del Sexto Centenario. ¡Gracias por su trabajo, su dedicación, su tiempo y, ante todo, «por su amor» a Antequera!