Qué se le va a hacer. El verano es lo que tiene y todo lo que encuentro en este mercadillo soleado a base de bien es plural y expresivo. Algunas veces excéntrico, como el nombramiento de Albiol ex alcalde Badalona y extremista xenófobo, pero el PP es así o quiero serlo, o eso cuentan.
En fin lo dicho, con estos calores no se puede meter una en berenjenales turbulentos, te puede dar un pasmo de calor y no estoy por la labor. Desde arriba veo la comitiva que se acerca, como cada mañana a preparar colchonetas, sombrillas, hamacas. Parecen una procesión de insectos multicolores. El viento que sopló anoche ha dejado barrida la arena de malos pensamientos y papeles comprometidos.
Las palmeras despiertan más ligeras de equipaje, ayer las podaron, mi libro de lectura más menguado, ligero de capítulos y presto al epílogo que está precedido de un juicio sumarísimo que no me quiero perder después de más de mil páginas. Por eso y porque siempre me ha gustado la abogacía, la judicatura. Acabo de ver una película del Hollywood de oro, “Mundos opuestos” Una joya dirigida por LeRoy y quédense con el título, el director y los protagonistas. Tomen nota: Barbara Stanwyck, James Mason, Van Heflin ¡and… Ava Gardner! Luego están los magníficos secundarios que en realidad son tan principales como el que más.
Mientras tanto los jóvenes que llegan a Magaluz siguen despeñándose por los balcones. ¿Qué se puede hacer? Yo siempre me lo he preguntado, porque llevamos años con esta imagen tan bárbara de un rincón de España. ¿Policía, Ayuntamiento? ¿No se pueden evitar estos paquetes turísticos, por llamarlos de alguna manera? Yo creo que sí, aunque se justifiquen con “reactivación económica”. Pues menudo plan!!
Acabo de subir de la playa y son las diez de la noche. Se corre de maravilla al lado del mar.
Nota: queridos lectores de mi columna, nos volveremos a ver después del verano, si Dios quiere, así que disfruten de él todo lo que puedan, pues caluroso o no, nunca volverá a pasar por nuestras vidas.
