A la vuelta de la esquina están la elecciones municipales de 2019. Como siempre, esta vez no menos que otras, los partidos tratan manos a la obra de no dejar escapar a sus mejores garantes. Con una formación naranja de moda y un bipartidismo que ya parece que huele a historia, al PP no le ha quedado más remedio que apostar por valores seguros.
En nuestra provincia los populares saben que no soplan buenos vientos. Es hora de no arriesgar, de jugar con las piezas más seguras del tablero y, en Antequera, Manuel Barón era la mejor carta para colocarla sobre el mantel. Por ello la elección en la iglesia de Santa Clara de los candidatos para enfrentarse a una nueva legislatura no dejaba lugar a dudas y ahí estaba y sonaba el nombre de Barón. Los vecinos lo quieren, los compañeros lo admiran y él es buena persona. Persona de palabra que en esta ocasión ha tenido que incumplir la que el mismo dijo de no mantenerse en el cargo más de dos mandatos. En política la lealtad es un valor a la baja pero muy revalorizado y Barón va a darle caché a ese término.
La bancada popular ha venido sufriendo golpes de todo tipo siendo la corrupción el mayor de todos los problemas que le acechan. Al igual que en Málaga el incombustible Francisco de la Torre ha vuelto a dar un paso adelante, Barón se ha visto en la obligación de revalidar su mandato. Y no lo ha hecho en balde: tiene ganas e ilusión y allá donde va muestra fuerzas de trabajo y rigor en todo cuanto hace y dice. Sin embargo, antes de su presentación y designación oficial en Santa Clara, las voces de la oposición ya habían cargado contra él. El socialista Francisco Calderón, que aún no ha conocido lo que es batirse el cobre, arremetió contra él diciendo que su palabra no vale nada, que los antequeranos y antequeranas no lo iban a creer.
En el PSOE, después de 40 años sentados en el sillón de gobierno de Andalucía la mediocridad se ha instalado en todos los sectores y ámbitos y no es de extrañar que este secretario de organización no haya tenido el más mínimo reparo en cargar duramente contra quien ha luchado por su ciudad. El PP en Andalucía no va a ser capaz de echar al PSOE por mucho que la gente se ilusione pero eso no quita que Barón vaya a seguir siendo un candidato fiel y luchador por su Antequera a la que ama y adora. Los que lo conocimos hace ya unos años y lo vemos ahora estamos en lo cierto. Felicidades Manolo.