Decir ¡Bendito seas!, es libertad; un gestoDecir ¡Bendito seas!, es libertad; un gestocreador. Ni tan siquiera, la vida; es más allá: Los coros angélicos (¿quién dijo, que el agua no era fuente?)
Clamar: ¡Bendito seas!, es sabersecapaz de dar un albaradiante a la perdiz; al puro enjambrede luz, la voz de niños, los perros, la hermosura –¡qué lujo, la hermosura!– comer, amar¡Qué cosas!
¡Bendito seas! –mi humano corazón– es como un cantoque pertenece a Dios, a la montaña,la gloria del azul y de la Sangre,que dice: Toma y bebe; brindemos de este vino.Qué corazón al aire!
Al bombero José Gil Al bombero José Gil