Dicen que la historia es cíclica, y a veces admirando eventos históricos o biografías uno parece recibir esa sensación. En las pantallas de todo el planeta, ya se estrena la última y épica gran aventura de un actor que desde sus comienzos ha estado presente en diferentes obras cinematográficas que han marcado época. La evolución de Tom Cruise desde su primer gran papel “Risky Bussines” (1983) hasta “Misión imposible: sentencia final” ha sido imparable. Hace poco más de un siglo podríamos buscar una analogía de esta estrella cinematográfica en otra, Douglas Fairbanks.
Sus pasos y ascenso en la cinematografía son muy paralelos. Douglas era a principios de la segunda década del siglo XX la gran estrella de acción de Hollywood. Llegó a ser productor de sus propias producciones, como Tom Cruise. Y culminó creando, junto a Charles Chaplin y Mary Pickford, la productora United Artists. El cine sonoro y su salud fueron retirándolo del universo cinematográfico donde brillaba.
En cambio, Tom Cruise de momento parece eterno. Su estado físico, mental y de plena dedicación a la cinematografía lo convierten en el mejor ejemplo de gran estrella con la mejor posición en consideración y respeto para la industria del cine. En noviembre del año 1920 los espectadores presenciaron las proezas del Zorro encarnado por Fairbanks en “La marca del Zorro”; hoy es Tom Cruise quien nos vuelve a traer esa magia del entretenimiento con “Sentencia final”.
Dos actores que hicieron y hacen del cine su razón de vida, buscando el más difícil todavía para sorprender a la audiencia. Esta vez, no será ver como un humano se transforma en un gigantón verde, o ver volar a jóvenes aprendices de brujos en escobas voladoras como si de motocicletas juveniles se tratasen; es ver al actor protagonista colgarse de una avioneta a miles de pies de altura, lanzarse al océano, seguirlo en luchas cuerpo a cuerpo brutales… en una misión imposible.
Frente a este espectáculo maravilloso de ritmo, fotografía e ingenio por sorprender al espectador, tan solo nos queda escuchar las palabras finales de Ethan Hunt (Cruise) en el tráiler promocional: “Necesito que confíe en mí. Una última vez”. Sin problema, Tom. Haz tu magia.
