Precisamente coincidiendo con la entrada de este nuevo año y debido a la nueva normativa ya vigente, muchos de ustedes seguramente se habrán planteado dejar de fumar. El simple sentimiento de intentar dejar de fumar debe interpretarse como algo muy positivo, aunque finalmente no se consiga. Recordemos que es habitual fracasar varias veces antes de conseguirlo.
Sinceramente dejar de fumar es difícil, la persona sufre ansiedad, nerviosismo, irritabilidad, frustración, mucho apetito, impaciencia y tiene dificultad en acciones tan cotidianas como dormir, concentrarse o incluso ir al baño. El tabaco es una droga y como todas las drogas desgraciadamente es muy complicado dejarla, incluso pensando en los beneficios que obtendremos si realmente lo conseguimos.
Lo primero que tiene que hacer si está pensando dejar de fumar es ponerle fecha, no demorarlo más en el tiempo. Posteriormente debe deshacerse de todos los cigarros que tenga a su alcance, evitando así tener fácil un acceso al tabaco. También es importante al principio evitar esas situaciones tan frecuentes en las que usted fuma, ya sea con los amigos, en los descansos del trabajo, viendo la televisión o conduciendo, por ejemplo. Recuerde que es muy importante que cuente con el apoyo de sus seres más cercanos, familia, amigos y compañeros de trabajo. Piense qué actividades va a hacer cuando sienta la necesidad de fumar, hay que entretener la mente y sobre todo, la mano y la boca. Póngase metas a corto plazo y si las va superando prémiese con algo que le agrade. Si nunca lo consigue, pude implicarse en algún programa de deshabituación tabáquica, asesórese por su médico porque en su farmacia existen medicamentos, parches, chicles o incluso cigarros de vapor de agua que pueden serle muy útiles. Para acabar, piensen que no todas las personas tienen la suerte de tener un farmacéutico íntimo y personal en casa.