No es la primera vez que utilizo el servicio de autobuses en Antequera para desplazarme de ahí a Málaga. Vivo en la capital pero vengo mucho a este pueblo por motivos personales y no tengo coche, así que necesito coger el autobús de Málaga a Antequera y viceversa, pero siempre pasa algo.
Lo peor que pasó para mí en uno de estos viajes fue que una mañana que tuve que llegar a trabajar a Málaga, pero el autobús estuvo tarde, completo y no me dejaron subir. No podía solucionarlo con alguien porque no hubo nadie en la ventana, solamente esa máquina. Al final, compartí el coche con unos estudiantes, pero llegué tarde a trabajar. No me parece serio que una ciudad como ésta lo permita.